Nacida en Huelva hace 26 años, desde muy pequeña siempre tuvo clara su vocación, trabajar en la televisión. Un sueño que ya ha visto bien cumplido estas Navidades como reportera y redactora en Telecinco. Una función de teatro de final de curso en la que Inmaculada Jiménez tuvo que interpretar a Carmen Alcayde en Aquí hay tomate le hizo darse cuenta que lo que le gustaba era comunicar, y desde ese momento tuvo clara su profesión: «Quería ser periodista».
Tras vivir la presión de profesores, amigos e incluso su familia, que intentaron convencerla de que el periodismo no iba a darle de comer, lo consiguió. Mientras estudiaba la carrera descubrió un mundo «para mí desconocido», el de las redes sociales y el periodismo digital: «Decidí abrirme un blog de moda y, lo que empezó siendo un entretenimiento ha acabado por convertirse en una plataforma estupenda para poder mostrarle al mundo lo que más me gusta hacer, comunicar mi manera de ver la vida y ¡atención! que, gracias a ello, he podido cumplir mi sueño y trabajar en un gran grupo de televisión como Mediaset».
En su aventura con el blog se hizo de un grupo de lectores fieles a sus publicaciones y cuando comenzó a despuntar el mundo de las redes sociales «se unieron a mí. Poco a poco cada vez me daba cuenta que el número de seguidores aumentaba, pero sobre todo subió con Instagram. Por suerte, tengo una hermana que es fotógrafa y creo que eso ha sido uno de los puntos que ha hecho que la comunidad @Cucanut [su nick en la red] cada vez sea mayor. Otro aspecto que creo que me ha favorecido en esto ha sido la naturalidad y mostrar que llevo un estilo de vida normal y corriente, como cualquier hija de vecino», reconoce. Y lo de @Cucanut, ¿de dónde viene? «En realidad no significa nada, pero cuando me abrí mi cuenta de Instagram quise buscar una palabra que no existiera, que no se pudiera asociar a nada y que le diera yo sentido». ¿Y lo de Cuqui de España? «En Huelva todo el mundo me conoce como Cuqui, y ya un poco con la guasa pues empezaron a decirme La Cuqui de Huelva, pero como el año pasado me fui a vivir a Madrid a probar suerte, la cosa ya se puso seria y pasó a un ámbito nacional así que, pues mira, La Cuqui de España. Pero siempre todo un poco en tono de broma», reconoce.
Actualmente cuenta con más de 20.000 seguidores. En Instagram más de 18.500, en Twitter unos 600, en la fan page de Facebook, más de 1.000 y en Youtube unos 700 suscriptores. «Me sorprende mucho cuando a veces me han parado algunos seguidores por la calle para decirme que me siguen y que les gusta lo que hago. A mí me encanta relacionarme con todo el mundo y la vedad que me hace mucha ilusión. En cuanto a comentarios negativos, prefiero hacer oídos sordos. Cuando te expones a esto es normal que surjan todo tipo de reacciones».
¿Y con qué red social se siente más cómoda La Cuqui de España? «Sin duda, Instagram, porque todo es muy espontáneo, instantáneo y visual. Lo que más me gusta y algo a lo que cada vez estoy más enganchada es a las stories. Me encanta poder compartir con todos mis seguidores las cosas que me pasan a diario, que no son pocas porque tengo un imán para las aventuras». Pero @Cucanut comenzó a consolidarse como influencer cuando superó la barrera de los 10.000 seguidores. «Algunas marcas me mandaban cosas a casa a cambio de que las enseñara y hablara de ella en mis redes sociales. La verdad es que he tenido la oportunidad de hacer cosas muy chulas gracias a las redes sociales. Una de las que más me ha gustado fue una campaña que hice con una marca de dulces navideños. Nos organizaron a varios influencers un día entero por la factoría y nos llevaron a diferentes fábricas de polvorones para que viéramos el proceso de fabricación. La verdad que pasamos un día muy divertido, me encantó».
¿Y qué es para esta joven onubense ser influencer? «Creo que en esta vida todo el mundo somos un poco ¿no? Cuando pruebas algo que te gusta o te va bien, se lo recomiendas a la gente de tu alrededor. Al fin y al cabo, esa es la función del influencer.
¿Y se hace o se nace? «... Te diría que influencer se nace», asegura. ¿Y en qué sector te gusta que te encasillen? «No me gustaría que se me encasillaran como influencer de moda porque creo que hay sobre muchos más temas sobre los que puedo y me gusta aconsejar. Por ejemplo, soy una friki del fitness, me encanta leer y también me encanta compartir cosas de mi vida diaria, eso que nos pasa a todo el mundo y que no nos atrevemos a contarlo o sí (risas)». ¿Qué te parece que algunos jóvenes tengan como objetivo ser de mayor influencer? «Creo que es algo normal. Hoy en día los niños pasan muchas horas frente a la pantalla del móvil o de la tablet y ven cómo sus ídolos se ganan la vida con eso. Todo el mundo queremos vivir una vida ideal y encima ganar dinero por ello».
Jiménez pasa largas horas delante de la pantalla de su móvil, y sigue también a otros grandes de la red como @Brioenfurecida, @Dity_closet o @Blancamiro, entre otros muchos. Algunos de ellos han llegado a sacar proyectos paralelos, como libros, etcétera.
¿Veremos algún día a @Cucanut emprendiendo algo parecido? «Ojalá. Mi sueño, aparte de seguir trabajando en TV, también es escribir un libro. Me encantaría algún día poder contar mi experiencia y mis vivencias en la vida y creo que podría ser divertido». ¿Y cómo ve Inmaculada Jiménez el futuro de @Cucanut? «Ahora mismo me gustaría centrarme un poco más y dedicarle un poco más de tiempo a mi canal de Youtube porque estoy descubriendo que es una plataforma muy divertida y muy curiosa, ya que puedo darle más rienda a mi creatividad. Actualmente he sacado rentabilidad con algunas colaboraciones, pero también es verdad que de momento no puedo vivir de ello», admite esta joven influencer que cada vez tiene más seguidores repartidos por toda España y Latinoamérica.