A muchas personas les apasiona la historia de Egipto y especialmente todo lo referente a sus faraones y a la vida en esa época. Turín es una ciudad que se encuentra en el noroeste de Italia, muy cerca de Suiza y de Francia. Esta ciudad tiene la particularidad de albergar el Museo Egipcio de Torino, el segundo museo más importante del mundo sobre la cultura egipcia (el primero se encuentra en El Cairo (capital de Egipto), es considerado un gran honor para todos los turineses. El museo está dividido en salas, pasando por las distintas épocas del Imperio Egipcio. Se pueden ver desde herramientas, esculturas, y vestimentas, hasta momias, huesos, y sarcófagos. Es también una visita recomendable cultural, estética e intelectualmente estimulante para los niños.
Si usted es una de las personas a las que le encanta o le interesa la cultura egipcia le recomiendo la posibilidad de programar un viaje para contemplar y disfrutar Turín y su museo egipcio le gustará. Fue fundado en 1724 por Vittorio Amedeo II junto con el museo de la real universidad de Turín, pero no fue hasta 1824 cuando se fundó oficialmente el museo de las antigüedades egipcias popularmente seria conocido como el museo egipcio, entonces las piezas recuperadas en Egipto por Vitaliano Donati a las órdenes de Carlo Emanuele III y la colección de Bernardino Drovetti que era consusl de Francia en Egipto, por lo que acaba siendo el museo egipcio más antiguo del mundo más antiguo incluso que El Cairo que aunque es más importante se fundó en 1902 y abrió sus puertas en 1909. La mayoría de las piezas del muso Egipcio de Turín fueron compradas por modestas cantidades de dinero o fueron recuperadas por las expediciones arqueológicas que se hicieron a finalews del siglo XIX en tanto en Deir el-Medina y Gebelein, en Heliópolis, en Asiut, en Guiza, o en Hermópolis, como en el Valle de las Reinas (la tumba de Nefertari).
En la actualidad el museo egipcio de Turín está prácticamente renovado desde su apertura en 2015. En la actualidad el museo tiene cuatro plantas distribuidas en 10.000 m cuadrados con más de 3.000 objetos en exposición y más de 25.000 en los almacenes. Es uno de los diez museos más visitados de Italia y uno de los cien más visitados del mundo, más de 700.000 personas recorren sus salas cada año. Se puede apreciar una de las piezas más relevantes del museo al que se conoce como el canon real de Turín que es la lista de los faraones de Egipto desde la prehistoria hasta la dinastía XVI del siglo XV a.C. incluyendo la duración de del reinado de los primeros gobernantes de Egipto.
De las cosas más impresionantes e interesantes que va a encontrar en el museo egipcio de Turín son una gran cantidad de momias con sus vendas y sarcófagos de todo tipo. Es interesante intentar ver la de los esposos Kha y Merit y la capilla de la tumba de Maya llevadas por el director del museo después de volver de sus principios del siglo XX donde exploró más de ochenta tumbas de 1903 a 1906. Las dos piernas momificadas que se encuentran en el museo egipcio de Turín parecen ser después de varios estudios la de la reina egipcia Nefertari, esposa real de Ramsés II el Grande. Pueden observarse estatuas de los faraones Tutmosis I, Tutmosis III de Amenhotep, Haremhab y de Ramsés II (que era el marido de Nefertari). La página web oficial del museo es http//museoegizio.it/ y para ir a verlo lo encuentran en Via Accademia delle Scienze, 6 que abre todos los días de 9.00 a 18.30 excepto los lunes que sólo abre por la mañana, de 9.00 a 14.00.La gastronomía de Turin muy rica y potente, típica del norte de Italia con platos contundentes y apetecibles para un español. Se usa la mantequilla, con influencias francesas y una mezcla de cocina popular y romana. Tiene muchos entrantes o antipasto tanto calientes como fríos acompañados de grissini. Entre los primeros muchas recetas de pasta fresca, especialmente, todo rellena, risotti y platos de cuchara; y muchos guisos, cocidos y estofados de segundo. Los postres son excepcionales, no olviden que Turín es una de las ciudades más golosas de Italia. Por otra parte recuerda que el aperitivo se inventó en Turin, en 1787 por Antonio Benedetto Carpano que inventó el vermut y, desde entonces, el aperitivo de las 6 a las 9 de la tarde es cada vez más importantes en Turín y al resto de Italia. La comida que acompaña a la bebida en un principio era la única protagonista del aperitivo– ha ido cobrando más protagonismo, tanto que ahora en Turín existe el concepto de apericena tan copiosa que sustituye la cena. Se recomienda tomarse el café típico en alguno de los cafés históricos de Turín es casi una obligación, hay que tomarse también un chocolate caliente con nata. El chocolate entró en Italia por Turín y es otra de las instituciones gastronómicas de la ciudad, especialmente los bombones de chocolate con avellanas con forma de pequeños lingotes– o las bignole unas pastas rellenas de crema pastelera y recubiertas de azúcar glaseado de diferentes colores según el ingrediente que se le añade: pistacho, avellanas, chocolate. Comer bien en Turín es fácil: hay muy buenos restaurantes de todo tipo con lo cual no hay muchos restaurantes para turistas y de diferente calidad para poder elegir.