Empezamos una nueva semana en la que la lluvia hizo de las suyas y se tuvieron que quedar en sus iglesias las hermandades del Cerro del Águila con la Virgen de los Dolores que de forma extraordinaria por los 75 años de la parroquia tenía prevista la salida por su barrio y La Pastora de Triana que por primera vez en su historia no saldría por las calles del viejo barrio. El domingo se arregló la cosa y entre otras, la hermandad de la Pastora de Cantillana pudo realizar la procesión eucarística tras finalizar la Novena y dar su último adiós a la Pastora Divina con el Rosario. Pero sin duda hay un lugar en la provincia por el que todos los cofrades, sea cual sea su devoción no deberían dejar de pasar. Ese lugar es la Parroquia de San Gregorio de Alcalá del Rio. La querida Hermandad de la Soledad ha sorprendido con motivo de su Quinario con uno de los altares más relevantes de este último siglo. No sólo por la ornamentación y riqueza de las piezas que se exponen, no sólo por la cuidada y excelente obra de priostía, ponerse a los pies del Señor de la Misericordia y la Virgen de los Dolores en su Soledad es como viajar en el tiempo y encontrarse con una estampa del siglo XIX. El impresionante Stabat Mater muestra a la Dolorosa a los pies del Cristo Crucificado, que de forma muy excepcional luce potencias de plata, las cuales hasta hoy no existía ningún referente fotográfico de haberlas llevado puesto que podría hacer mas de dos siglos que no se les colocaban. No os lo podéis perder. Hazme un favor, sé feliz.