El adelanto electoral en Andalucía ya parece un hecho cierto. Si hasta ayer se intuía con fuerza por muchos, tras esa especie de ultimátum que ha lanzado ayer Albert Rivera, todo parece indicar que este próximo otoño en Andalucía se pasará por las urnas. Y falta por saber si Pedro Sánchez aprovecha la oportunidad y adelanta las elecciones generales haciendo coincidir las fechas. Es muy posible que sea así porque, por más empeño que ponga el presidente del Gobierno para que no lo parezca, el número de diputados con los que cuenta en el Congreso de los diputados es del todo insuficiente. Además, siempre que han coincidido ambos comicios, los resultados obtenidos por el Partido Socialista Obrero Español han sido excelentes.
Rivera acusa a Susana Díaz de no haber cumplido con los acuerdos a los que se llegaron en el momento de la investidura de la presidenta. El líder andaluz de Ciudadanos, Juan Marín, informará en Málaga durante la Ejecutiva nacional de su partido aunque los aforamientos no eliminados, la ley electoral y las listas abiertas, son las razones por las que Ciudadanos se planta y deja al Gobierno de Díaz sin una estabilidad de la que tanto presumía la presidenta andaluza. Esas son las razones que dicen tener en Ciudadanos.
En realidad, Rivera quiere hacer creer que la razón del adelanto electoral es su ultimátum. Sin embargo, es posible que nadie lo crea puesto que es algo que se viene anunciando hace tiempo. Por su parte, Susana Díaz señalará (si es necesario) a Rivera como el causante de tener que votar antes de tiempo intentando obtener beneficios en las urnas. Es decir, el discurso electoral está en marcha y cuando la maquinaria arranca es muy difícil de parar.