120 años de El Correo de Andalucía

120 Años de innovación. Comunicando desde el Bien Común

El Cardenal Spínola fue un gran innovador. Quiso, el fundador, comunicar y siempre pedía que la comunicación fuera certera, veraz y constructiva.

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10 feb 2019 / 17:35 h - Actualizado: 10 feb 2019 / 17:45 h.
"120 años de El Correo de Andalucía"
  • 120 Años de innovación. Comunicando desde el Bien Común

El Cardenal Spínola fue un gran innovador. Tuvo una gran sensibilidad social y entendió que comunicar, desde el Bien Común, suponía ayudar a la sociedad a construir un espacio de dialogo esencial para avanzar en la concordia y en el desarrollo de una sociedad más coherente y justa.

Movió, al beato Spínola, su sensibilidad por comunicar la Buena Noticia a involucrarse en la puesta en marcha de un medio de comunicación. Un medio que cumple 120 años, superando dificultades. Sigue estando presente, siendo el medio decano de la prensa, y lo hace, no tengo duda, a la presencia dinámica del espíritu del Cardenal.

Hoy, 120 años después, El Correo de Andalucía tomó una sabia decisión: centrarse en la aplicación digital, abandonando el papel. Lo hizo desde la innovación y mirando a su fundador. La continuidad de un medio de comunicación supone saber adaptarse a los tiempos. El Cardenal supo interpretar lo que era necesario para que la Iglesia pudiera comunicar, desde el Bien Común, lo que sucedía en su entorno; por esta razón se arriesgó a poner en marcha un medio de comunicación. Quiso, el fundador, comunicar y siempre pedía que la comunicación fuera certera, veraz y constructiva.

El actual Correo de Andalucía busca, respetando el espíritu de su puesta en marcha, centrarse en una comunicación en donde el eje de su editorial sea el Bien Común. Es, sin duda, mirar a lo que el Cardenal quiso que fuera este medio.

En la visión de su actual editor siempre ha estado la voluntad de lograr que, teniendo presente la realidad social de este siglo, El Correo de Andalucía fuera un proyecto que, además de comunicar lo que acontece en Sevilla, pudiera recoger aquellas noticias que interesaran a todos los sevillanos y andaluces que viven fuera de Andalucía. Quiso que El Correo TV y El Correo de Andalucía pudieran interaccionar para lograr ser un medio que, aprovechando lo digital, pudiera enriquecer al papel. Esta idea nunca fue abandonada por el editor, y hoy esto es posible gracias a la decisión de que El Correo de Andalucía tenga un formato digital.

Innovar es adelantarse y reflexionar sobre lo que puede ser más pertinente para responder a las necesidades que las personas podemos plantear.

El Correo de Andalucía, en su actual formato y atendiendo al Bien Común, quiere ser un medio que avance en una comunicación que haga vibrar a una sociedad sensibilizada por tener una información veraz y constructiva. Su fundador quiso que este periódico pudiera ayudar a construir una sociedad desde una libertad positiva y fraterna.

El Concilio Vaticano en la Gaiudum et spes nos recuerda al respecto "La libertad humana con frecuencia se debilita cuando el hombre cae en extrema necesidad, de la misma manera que se envilece cuando el hombre, satisfecho por una vida demasiado fácil, se encierra como en una dorada soledad. Por el contrario, la libertad se vigoriza cuando el hombre acepta las inevitables obligaciones de la vida social, toma sobre sí las multiformes exigencias de la convivencia humana y se obliga al servicio de la comunidad en que vive. Es necesario por ello estimular en todos la voluntad de participar en los esfuerzos comunes. Merece alabanza la conducta de aquellas naciones en las que la mayor parte de los ciudadanos participa con verdadera libertad en la vida pública"

Comunicar en una sociedad como la nuestra implica comprometerse con la verdad. La comunicación nos exige a todos un compromiso ético, por cuanto es necesario ayudar a que las personas podamos saber que la noticia es rigurosa y veraz. Hoy, con excesiva frecuencia, se generan noticias con bastante falta de rigor, pretendiendo, además, hacer daño. Existe una manipulación que, con el tiempo, desacreditará a quien la comunica. Comunicar conlleva establecer un canal adecuado para que quien se informe a través de un medio pueda crecer en libertad y no mediatizado, al final manipulado, por quien genera la noticia.

El Cardenal Marcelo Spínola quiso, que el medio de comunicación que él creaba, tuviera rigor y fuera éticamente saludable. Quería contar la verdad para ayudar a construir una sociedad más justa. El Correo de Andalucía pretende seguir esta estela. Ser un medio digital que busca acercar a sus lectores a un conocimiento positivo de la realidad social, política, económica, cultural y religiosa.

El Correo de Andalucía es consciente de esta misión y por esta razón, desde el concepto del Bien Común, intenta ser fiel a lo que el Concilio Vaticano II señaló en el Decreto "Inter mirifica" - Sobre los Medios de Comunicación Social- "Para el recto uso de estos medios es absolutamente necesario que todos los que se sirven de ellos conozcan y llevan a la práctica en este campo las normas del orden moral. Consideren, pues, la especial naturaleza de las cosas que se difunden a través de estos instrumentos, según la peculiar naturaleza de cada uno; tengan, a la vez, en cuenta, las circunstancias o condiciones todas, es decir, el fin, las personas, el lugar, el tiempo y demás datos que entran en juego en los diversos medios de comunicación, y aquellas otras circunstancias que pueden hacer perder su honestidad o cambiarla; entre las cuales el carácter específico con que actúa cada instrumento, es decir, su propia fuerza, que puede ser tan grande que los hombres, sobre todo si no están formados, difícilmente sean capaces de advertirla, dominarla y, si llega el caso, rechazarla".

Con la vocación de innovar, El Correo de Andalucía, en su etapa digital quiere, además de lo señalado anteriormente, y con la intención de celebrar su 120 cumpleaños colaborar con la Fundación Chávarri por el Bien Común y con la Universidad Nebrija en el desarrollo de las actividades que ambas Instituciones realizarán en Sevilla por medio de la Cátedra Fundación Chávarri por el Bien Común.

La Cátedra tiene un doble objetivo, por un lado generar un espacio de reflexión que interaccione a empresarios y directivos de empresas con los principios del Bien Común para proponer modelos y líneas de acción en la gestión de la empresas; y por otro fomentar un lugar de reflexión entre éstos y los políticos con el fin de proponer medidas que ayuden a un desarrollo de la economía que verdaderamente genere riqueza social.

Uniéndonos a la Cátedra por el Bien Común pretendemos cumplir con lo que el Cardenal Marcelo Spínola pretendía al fundar El Correo de Andalucía: difundir la positividad de lo que de bueno se hace en la sociedad.

Entendemos que nuestro medio de comunicación unido al tejido empresarial, al docente y al político, este último con verdadero espíritu de servicio y reconociendo los principios democráticos, responde al principio de construir noticias que aportan valor y cumplen con los principios que el Cardenal quiso dotar al Correo de Andalucía. Por esta razón tenemos muy presente lo que el Decreto "Inter mirifica" refleja: " En necesario, más que nada, que todos los interesados, en la utilización de estos medios de comunicación se formen recta conciencia sobre tal uso, en particular por lo que se refiere a algunas cuestiones agriamente debatidas en nuestros días. La primera cuestión se refiere a la llamada información, a la obtención y divulgación de las noticias. Es evidente que tal información, por razón del moderno progreso de la sociedad humana y por los más estrechos vínculos entre sus miembros, resulta muy útil y, las más de las veces, necesaria, pues el intercambio público y puntual de noticias sobre acontecimientos y cosas facilita a los hombres un conocimiento más amplio y continuo de la actualidad, de modo que puedan contribuir eficazmente al bien común y al mayor progreso de toda la sociedad humana. Existe, pues, en el seno de la sociedad humana el derecho a la información sobre aquellas cosas que convienen a los hombres, según las circunstancias de cada cual, tanto particularmente como constituidos en sociedad. Sin embargo, el recto uso de este derecho exige que la información sea siempre objetivamente verdadera y, salva la justicia y la caridad, íntegra; en cuanto al modo, ha de ser, además, honesta y conveniente, es decir, que respete las leyes morales del hombre, sus legítimos derechos y dignidad, tanto en la obtención de la noticia como en su divulgación"

La próxima semana mi reflexión tratará de acercarnos a la Responsabilidad Social de los Medios de Comunicación.