¿Contra quién luchan ustedes, señoras? Con esta pregunta terminaba mi columna anterior. Lo de señoras no es ningún tono irónico sino sincero y creo que es el tratamiento respetuoso que se le debe dar a toda mujer aunque en mis clases a veces alguna alumna me haya dicho: “No, señorita”. Señoras y punto.
Una huelga se dirige contra alguien y esto es lo que no tengo claro, contra quién va la huelga del día 8 de marzo. Porque estamos en una sociedad cuantitativa que echa las cuentas rápidamente. ¿Cuánto me va a costar esto de atender a los pesados de los hombres y ahora para colmo a la aspiración femenina para que las mujeres no sean discriminadas? Entonces, como los políticos no echarán las cuentas porque viven de la mentira y de los cuentos de hadas, consulto la actualidad económica y financiera que es el poder de verdad y no esos que se meten en unas listas aunque sean cremallera. Extraigo algunas ideas de esa actualidad que me sirven los medios de comunicación.
“La deuda contraída a escala mundial por las empresas alcanzó en el 2018 el récord histórico de 11 billones de euros, lo que duplica el volumen de diez años atrás. Para la OCDE, es un nuevo foco de riesgo para la economía mundial. “La cantidad de la deuda ha aumentado. Su calidad ha empeorado. Y los riesgos han aumentado”. Con estas palabras telegráficas resumía la pasada semana Mats Isakssson, jefe del departamento de gobernanza y finanzas empresariales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) los actuales desequilibrios de la economía mundial.” (La Vanguardia).
“Sánchez sube el gasto público en 5.170 millones con medidas electoralistas”. “Parte de este gasto surge al resucitar varias de las medidas contenidas en los Presupuestos como reales decretos-ley (RDL). Este es el caso de la cotización con cargo al Estado de las cuidadoras no profesionales de dependientes y la ampliación del permiso de paternidad de cinco a ocho semanas, una serie de iniciativas cuyo visto bueno supone de manera conjunta una subida del gasto de 610 millones, y a la que habría que añadir la inminente aprobación del subsidio para parados de larga duración mayores de 52 años con un coste aproximado de otros 300 millones de euros. Sin embargo, el conejo en la chistera que se guarda el Gobierno es otro. Como confirmó el Ejecutivo la semana pasada, el Consejo de Ministros aprobará una oferta pública de empleo (OPE) antes de los comicios.” (El Economista).
¿Cuánto más hay que gastar en equiparar los derechos de las mujeres a los de los hombres o los derechos de los hombres que haciendo el mismo trabajo que las mujeres en trabajos “de mujeres”, cobran igual que ellas que ya están discriminadas en relación con otros trabajos considerados “de hombres”? Es que todo esto deben explicarlo los políticos, los empresarios y la UE, no se trata de que nos echen la bronca a los varones porque no estamos contribuyendo a las tareas domésticas al 50 por ciento, al menos, a ver si el encabronamiento contra la macro-historia la van a derivar las mujeres a la historia de la vida privada. Por eso me vuelvo a preguntar, ¿contra quién luchan ustedes?, ¿contra el mundo? Pues eso es lo que llevan haciendo millones de hombres durante toda la Historia, empezando por los socialistas revolucionarios del siglo XIX que son los primeros en la historia contemporánea que se preocuparon seriamente por los derechos de la mujer, sin contar con Platón para el que en su República no había discriminación entre hombres y mujeres pero el filósofo me coge ya bastante más lejos.