Estimadas y estimados: a Rajoy lo ha echado la corrupción. Para muchos ciudadanos de este país era inexplicable, vergonzoso, que el Presidente del Gobierno fuese la cabeza visible de un partido político con muchísimos de sus líderes procesados y condenados por corrupción y que no asumiese su responsabilidad política. La sentencia Gurtel y la detención de Zaplana fue la gota que colmó el vaso (¿os acordáis de quién era Zaplana? Haced memoria, por favor. ¿Habéis leído por qué lo han enviado a prisión?).
Pues bien, de esta situación se benefició legítimamente Pedro Sánchez “el desaparecido”, presentando una moción de censura inevitable. Me explico: o esto o permitir que vuestro admirado Rivera friese a fuego lento a vuestro querido Rajoy. Puestos a ser sinceros he de decir que Sánchez se aprovechó de los hediondos lodos del PP y de la torpeza de Ana Pastor, porque solo a una novata se le ocurre fijar el día de la moción para tan solo una semana después de planteada. Los aliados circunstanciales de Sánchez no han dispuesto de tiempo ni para venderle caro su apoyo. La cabeza de D. Mariano ha sido el único precio, ¡y menudo precio! “Dimita usted, Sr. Rajoy, y aquí acabará todo esto”, le espetó el líder del PSOE desde la tribuna de oradores, pero no hubo respuesta, como casi siempre. Así que comprended que la gente esté contenta. Que la corrupción tenga coste político es una magnífica noticia para todos, seamos de izquierdas o de derechas, ¿o no?
Más cosas, queridas y queridos. Nadie en este país vota al Presidente del Gobierno, sino que es el Congreso el que lo elije y el que puede censurarlo. El nuestro se llama régimen parlamentario por esta razón, y se muestra así de vivo cuando la composición de las Cámaras está muy fragmentada. Pero vamos, me consta que nada de esto os pilla por sorpresa, aunque os guste disimularlo cuando no funciona a vuestro favor.
Aún así me diréis que Sánchez presidirá un gobierno muy inestable. No os quitaré la razón. Pero vaya por delante que su primera decisión ha sido la de asumir los presupuestos de Rajoy. Si Bruselas nos mira con tranquilidad, ¿no deberíais vosotros hacer lo mismo? Pero como sé que sois duros os añadiré algo: Sánchez ha apoyado sin fisuras la aplicación del 155 CE. El PSOE siempre ha sido leal en lo importante, faltaría más. Es cierto que ha ofrecido a Torra diálogo, pero lo mismo hizo Rajoy (tirad de hemeroteca). Y otra cosa más. Si llegado el caso Podemos acorrala al PSOE y le hace la vida imposible, os recuerdo que quien puede disolver las Cortes y convocar elecciones bajo su exclusiva responsabilidad se llama Sánchez. Que no se pasen de listos.
En fin, amigas y amigos de la derecha, quedad en paz. Yo lo estoy, muchos lo estamos, y hoy mismo nos tomaremos una cerveza juntos para seguir conviviendo. Veníos.