Los caminos son los veneros de sangre en polvo que levantan los peregrinos al cielo. Todos irán confluyendo en el corazón de la marisma que tras oxigenarse en el pulmón de Doñana volverán purificados por la Virgen a sus lugares de origen en unos días. Hoy prácticamente estarán la totalidad de hermandades en el camino y a su vez irán llegando poco a poco a la aldea. La hermandad del Salvador será la última filial que partirá desde Sevilla. Un discurrir señorial por el centro histórico con momentos entrañables, la gran petalada acompañada por las plegarias del coro de la hermandad en Hernando Colón desde la sede de B&V o la despedida de la Virgen de los Reyes a los pies de la Giralda. Los caminos de Huelva y de Cádiz desembocan en el Rocío por el Manecorro trayendo las brisas de Bonanza que viene con Sanlúcar de Barrameda, por las Tinajas a San Juan del Puerto con aires centenarios y por el Camino de los Llanos, La Palma del Condado y Rociana en busca de la Señora. Mientras tanto el peregrino sigue soñando con su romería lejana. De nuevo la diana con la que de despierta todos los días hoy no suena en su móvil sino al lado de la carriola. El olor a café de puchero y la hierba húmeda es el mejor pellizco para saber que es verdad, también, cómo no, el dichoso generador que empieza a rugir. Su gitana se lava la cara en una palangana y se maquilla en mientras preparas las cosas para el día. Le agarraras de la mano y darás de nuevo gracias a la Virgen.
Hazme un favor, sé feliz. ~