España da la cara por Barcelona

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Juan Luis Pavón juanluispavon1
16 nov 2017 / 20:32 h - Actualizado: 16 nov 2017 / 20:34 h.
"Pasa la vida"

Como una madre que se traga sapos cuando toca proteger el porvenir de sus niños malcriados, a pesar de la actitud incordiante, insensata y gravosa de las criaturitas, así está España dando la cara por Barcelona a nivel internacional. A pesar de los problemas de todo tipo que nos crean dentro y fuera de Cataluña su caótica cantera de dirigentes. Doctorados cum laude en irresponsabilidad. Élites extractivas que se han especializado en sacar rédito de practicar la conflictividad, agobiar al personal, demonizar al prójimo y exigir que les resolvamos los líos que provocan. Tanto se están acostumbrando a dedicarse intensamente a enredar en quimeras de salón y conspiraciones de masía, que desatienden las prioridades más elementales del bien común que dicen defender y representar, pues les parece que va de suyo el funcionamiento por inercia de su comunidad o de su municipio.

El enésimo ejemplo de esta paradoja es la labor bajo cuerda que están haciendo el Rey y el Gobierno de la nación para tranquilizar a los promotores norteamericanos del Mobile World Congress, con el fin de aportarles la garantía del Estado para que lo sigan celebrando en Barcelona con toda normalidad y esplendor, y continúe generando más de 600 millones de euros en la economía barcelonesa. Mientras, en el Ayuntamiento se juega a romper la coalición de gobierno y a desmontar los equipos directivos de varias concejalías, con lo que ello supone de parálisis en la gestión de áreas municipales.

Si Felipe VI y Rajoy consiguen que en la Unión Europea se traguen una ración de sapos y retomen la confianza en la candidatura de Barcelona para acabar asignándole la sede de la Agencia Europea del Medicamento, a pesar de todas las movidas antisistema y de todos los discursos antieuropeos que han protagonizado los próceres del falaz “derecho a decidir” para espantar esa gran inversión en la tierra que dicen amar, incluso Ada Colau tendrá que hacer de tripas corazón y proponer que de nuevo se ubique el busto de un Borbón en el salón de plenos. El Rey que fue a Barcelona a manifestarse contra un atentado terrorista en las Ramblas y a cambio recibió una encerrona de abucheos y pancartas.

Desmontan el pacto de gobierno local en un momento tan excepcional de la vida de Barcelona. De alerta roja con la fuga de empresas y la caída de la actividad en todos los sectores productivos y de consumo. Y escenifican desde las Casas Consistoriales la insumisión respecto al orden constitucional y a las decisiones de los jueces. Como tarjeta de visita para conservar los congresos y para conseguir que se afinquen instituciones es una inmadurez más colosal que la montaña de Montjuïc.