Los medios y los días

¿Hacia el caos en España?

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31 mar 2019 / 09:13 h - Actualizado: 31 mar 2019 / 09:21 h.
"Los medios y los días"
  • ¿Hacia el caos en España?

Los periodistas tenemos una responsabilidad social tremenda. Y los profesores e intelectuales también. Yo me considero las tres cosas y por eso titulo así mi columna aunque me puedan acusar de levantar alarma social. No, lo que intento es reflexionar sobre la situación que atraviesa España que yo creo que empieza a ser muy grave a raíz de hechos concretos que me impulsan a pensar no tanto en el ahora sino en el tiempo posterior a las elecciones del 28 de abril.

En esta semana que termina hoy domingo, el profesor y político Luis Ángel Hierro nos decía a alumnos y profesores del Máster Oficial en Comunicación Institucional y Política –que tengo el honor de dirigir- que España es un gran país que ha salvado una serie de encrucijadas históricas terribles y que también salvaremos las que se nos pongan por delante. Totalmente de acuerdo, lo malo es que a lo peor tenemos que vivir otra de esas crisis y eso no es nada razonable en estos tiempos. Podremos superar obstáculos pero lo preocupante es que, mientras tanto, tal vez suframos una situación angustiosa y violenta que se puede llevar por delante nuestras expectativas del presente y del futuro y que nos puede separar del carro mundial.

Parece como si estuviéramos dispuestos a cometer errores del pasado. El profesor Hierro nos colocó ante nosotros la foto de los Pactos de la Moncloa y nos dijo: “Estos señores eran todos muy diferentes pero lograron ponerse de acuerdo”. Por supuesto, aquellos señores encerraban diferencias ideológicas mucho más sustanciales que los políticos actuales. Hoy necesitamos estadistas que nos saquen de ésta, no políticos que estimulen la independencia de Cataluña aunque sea sin querer o partidos de derechas insultándose o un Pedro Sánchez largando medidas para comprar votos sin contarles a los ciudadanos con toda claridad qué va a hacer si gana por mayoría absoluta o si lo hace por minoría que es lo más probable y en ese caso ya veremos si puede aplicar sus medidas sociales con una deuda cercana al PIB.

Señoras y señores, la convivencia entre españoles corre mucho peligro, así de claro, y mientras antes se tenga esto diáfano, mejor. Cuando se sufre un problema gravísimo no vale huir ni matar al mensajero que lo anuncia sino tomar el toro por los cuernos. Cataluña se puede ir, Navarra puede ser agregada a Euskadi con la oposición de muchos navarros, Euskadi a su vez no va a renunciar nunca a sus fueros, Cataluña desea tener unos fueros como Euskadi, la típica recesión de los sistemas capitalistas se aproxima, la inseguridad ciudadana crece en todos los sentidos; digan lo que digan, la migración es una encrucijada que no es para enfocarla bajo las premisas de una falsa y utópica solidaridad, millones de ciudadanos han sido contagiados por un virus dogmático derivado de la falta de preparación histórica y cultural, las derechas dicen que lo mejor para Cataluña es 155 a tope y eso –tal y como es la derecha española- puede crear más independentismo todavía y los muertos que el independentismo espera. Y me da en la nariz que el ejército no va a aguantar esta situación de caos.

Tener que escribir esto es terrible en 2019 pero creo que estoy en la obligación de hacerlo porque estimo que el mundo político –si es que de verdad está interesado en el bien común y el progreso español- debe recapacitar y llevar a cabo un pacto constitucional –con el PSOE en él- bajo unas premisas de ideas claras que transmitir a los españoles, unas ideas que siembren el máximo grado de tranquilidad e ilusión posible entre el máximo número de ciudadanos posible. Jugar a la chulería y dar el espectáculo que está ofreciendo la clase política es jugar con el presente y el futuro de todos.

Más claro: se precisan con urgencia políticos muy bien preparados, iguales o mejores que aquellos de la transición que actuaron sabiendo que la guerra civil -o algo parecido- podía repetirse y aún así sufrimos varios intentos y conspiraciones de golpes de estado, el más visible, el 23F. Por fortuna, la situación no es igual pero sí similar. Deseo fervientemente equivocarme en todo pero prefiero exagerar a quedarme corto con tal de que quienes corresponda tomen nota si les place. Estoy pensando en el post 28 de abril.