Parece que la serie Juego de Tronos rodará en Sevilla su octava temporada. Lo hará en primavera porque si el rodaje se prolonga hasta el verano los protagonistas también rodarán, pero sin puntilla. Con las altísimas temperaturas que se viven en Sevilla en estas fechas, les adelanto algo de lo que pasará en la nueva temporada. El enano Tyrion Lannister se echa tanta agua encima con una regadera que acaba creciendo y jugando de pívot en el Betis Energía Plus. El manco Jamie Lannister acude a Urgencias del Virgen del Rocío, donde piden que le pongan la mano que le falta, para llevar la espada en una mano y el abanico en la otra. A John Nieve lo matan un grupo de turistas que lo echan a un valdepeñas con casera en una terraza al sol. La rubia Daenerys Targaryen cambia los dos dragones por dos caballos de un coche de los de la Catedral a las cuatro de la tarde de agosto, animales que no tienen alas pero que también echan fuego por la boca. La niña Arya Stark se va a hacer footing por el Parque de María Luisa, con 45 grados a la sombra, y la ingresan por una lipotimia, cambiándose el nombre a Túcomo Stark, que es lo primero que le dicen los de la Cruz Roja cuando recobra el conocimiento. Y la reina Cersei repite su nombre varias veces en voz alta en el Alcázar y se la llevan dos policías locales porque creían que pedía un Jersey en agosto. Esto es algo de lo que pasará en la última temporada de Juego de Tronos. Porque si ruedan en Sevilla en verano, les aseguro que será la última.