La I Carrera Solidaria se celebrará el próximo 4 de marzo y estará dedicada a la lucha contra el cáncer infantil, tendrá lugar en Cantillana, será un homenaje a todos los que luchan contra esta enfermedad y muy en particular a Alejandro Ortiz, pero también –para este que escribe– será un testimonio de respeto, ánimo y amistad a dos grandes personas, a dos grandes luchadores como son sus padres, María del Mar y Joaquín.
«Quiero que se me recuerde ayudando en la planta de Oncología a los niños nuevos que no aceptaban estar allí». Estas palabras escribió Álex en una carta que guardan sus padres y que muestra lo grande e inmortal que puede llegar a ser un niño de 14 años. Sencillamente nos dio con esas palabras una lección de vida, que no debemos olvidar para lograr ser mejores personas.
Son muchas las vidas que se cobra esta enfermedad, pero no son tantos los padres que les quedan fuerzas para –además de una pérdida cruel e irrecuperable– seguir adelante y luchar por los hijos de los demás. Eso dice mucho de quienes lo hacen y logran. Eso lo dice todo de los padres de Álex, seguro motivados por la grandeza de su hijo.
Se define orgullo como la satisfacción personal que se experimenta por alguien que consideramos valioso, yo me siento orgulloso por lo valiosa que siempre ha sido y sigue siendo esta familia.
En rojo he señalado en el calendario el día que se celebre la carrera contra el cáncer infantil, el día que recordemos el espíritu de Álex. Ese día quien me quiera encontrar que me busque en Cantillana, aprendiendo lo que es la vida junto a dos buenos amigos, y ayudando en lo personal a dos padres que ayudan a los demás pese a haber perdido lo más valioso de sus vidas: su hijo. En eso consiste el coraje y la valentía, pero, sobre todo, el amor.
Mientras tanto, ¡sé feliz! ~