La invasión del carril bici

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13 feb 2017 / 23:33 h - Actualizado: 13 feb 2017 / 23:36 h.
"Laboratorio ciudadano"

Las calzadas de las ciudades se llenaron de coches y las aceras fueron invadidas por los veladores y el mobiliario urbano de todo tipo y condición. Los carriles bici van camino del colapso por el uso indiscriminado que hacen de ellos corredores, patinadores, padres y madres con carritos de niños o de la compra, turistas con maletas de ruedas, usuarios de todo tipo de bicis y patinetas eléctricas.

Una de las primera quejas de los vecinos de cascos históricos con saturación turística fue la del ruido del trasiego a todas horas de las maletas con ruedas sobre el adoquinado de las calles céntricas, que se evita utilizando el carril bici por su piso sin desniveles, ni rugosidades. Los carritos de bebés y de la compra se llevan también con más comodidad por los citados viales. Las personas con movilidad reducida o diversidad funcional también encuentran en las ciclovías un oasis al que recurrir para evitar los múltiples obstáculos que se encuentran en sus desplazamientos: escalones, bordillos sin rebajes, barreras por doquier...

En el contexto descrito el conflicto está servido. El incremento de las peatonalizaciones y la movilidad sostenible: bicis, triciclos y patinetes eléctricos o no, están obligando a repensar el escaso espacio urbano disponible para armonizar intereses y deseos legítimos de distintos sectores de la ciudadanía.

La solución pasa inexorablemente por un aumento de la responsabilidad y el civismo a la hora de moverse en la calle. Hay que respetar el carril bici y desviar los otros flujos que lo han invadido a aceras más libres de obstáculos con la meta puesta en tranquilizar la vida urbana para conseguir la ciudad inteligente, amigable e inclusiva, que no margine a nadie.

Todos tenemos que sentirnos más a gusto en el entorno urbano, pero nuestro bienestar no debe serlo a costa del malestar ajeno. Hay que lograr la accesibilidad universal con la supresión absoluta de las barreras arquitectónicas, sustituir pavimentos de aceras por otros de menor impacto acústico a base de caucho reciclado como los de las zonas de juego infantiles, entre otras medidas.