¿Cual es la obligación de la cadena local que retransmite los grandes eventos de Sevilla? Debe, sin duda, observar que los errores humanos existen, y por tanto debe mirarse más allá.
La televisión ya se ha puesto a trabajar de cara a la Semana Santa. Se han tomado decisiones para anular la posibilidad de que pueda repetirse el escenario de la Cabalgata. Lo hace por obligación, por convencimiento y por devolverle a los sevillanos su forma de abrir las puertas de las casas a El Correo TV todos los días del año.
Esta televisión es una apuesta decidida por Sevilla, por sus tradiciones y por las cosas del alma. Es el proyecto que sostiene, con sus pulmones, Antonio Morera Vallejo al frente de su grupo de empresas. Y aquí seguimos, y asumimos lo que venga. Por Sevilla, sólo por ella.
En breve habrá noticias pero está prácticamente cerrado el acuerdo de la seguridad de los elementos televisivos para la Semana Santa. Se va a garantizar –aunque en dieciocho años no pasó nada– que las cámaras no sobrevuelan los pasos de nuestra Semana Santa. Por si alguna persona se salta las normas básicas de educación.
Temple, disciplina y esfuerzo. Y amor por Sevilla. Constancia y sonrisa. Todo al servicio de la información. Por esta ciudad hay que dar la cara, y el pecho si hiciera falta. Lo que no podemos garantizar es que todo el mundo se alegre de los éxitos de una ciudad que vive su Semana Santa con esta intensidad tan hermosa y que confía en El Correo TV para que sea testigo y notario que lleve a todos los hogares del mundo su semana fundamental.
A los problemas, soluciones. Hay que adelantarse a las situaciones que puedan empañar, si quiera levemente, la Semana Santa de Sevilla. Ya está todo estudiado.
Vamos a vivir, seguro, una semana de Pasión memorable. Y ahí estará El Correo TV, como siempre, para que quede constancia ante el mundo entero. Estamos de enhorabuena. Así es que... sonría.