Ya en su día les comenté de una persona que había dedicado toda su vida a la medicina y especialmente al tratamiento de la lucha contra el cáncer, ahora que le ha llegado su jubilación se dedica a escribir y presentar un libro que, según las noticias que me llegan, Sanlúcar la Mayor ha recibido con agrado.
La doctora Ana María Álvarez Silván presentó oficialmente su libro Dame la mano el pasado jueves 9 de febrero en la biblioteca pública municipal Juan Ramón Jiménez. Dame la mano es su primera obra, con la que tiene el propósito de ayudar a los niños con cáncer y a sus familias. Ana María Álvarez vive en Sanlúcar la Mayor desde 1995. Hace unos meses, en septiembre de 2016, se la condecoró con una calle a su nombre en el barrio de La Paz, de cuya hermandad es hermana y devota. Este homenaje sirvió para que fuera más conocida entre los vecinos.
La doctora ha sido pionera en su labor profesional. Entre sus méritos destaca la creación de las primeras unidades de Oncología pediátrica en España, además de ser la primera y única mujer designada médico emérito de un hospital en toda Andalucía, nombrada, con carácter honorífico y vitalicio, por el Servicio Andaluz de Salud. Quizá, el premio más importante de su carrera son las vidas de los más de 800 niños y niñas a los que les ha dado una segunda oportunidad. De hecho, con ellos sigue fomentando la lucha contra el cáncer infantil, creando el grupo de Jóvenes Valientes Curados de Cáncer, desde el que se está prestando voluntariado y apoyo a niños y niñas, padres y madres que ahora mismo están atravesando esta enfermedad.
Entre los numerosos galardones y reconocimientos recibidos por Ana María Álvarez sobresalen, por ejemplo, la Medalla de Oro de la Ciudad de Sevilla. Es una persona encantadora y el día que hablé con ella en la radio, pude sentir a través de sus palabras que detrás de esta doctora está un ser humano extraordinario.