¿Recuerdan cuando el ahora capitalista Felipe González se enteraba por los periódicos de toda la podredumbre que había en su partido? Pues estamos en las mismas con el juicio de los ERE. A mí que me registren. ¿Se imaginan este caso de corrupción, el de más envergadura de la democracia, si hubiera estado gobernando el Partido Popular en Andalucía? Ignacio Escolar hubiera disfrutado como un cochino en un charco. Con independencia de en lo que vaya a quedar este asunto judicialmente, está la responsabilidad política y ya ven lo que ocurre: nadie sabía nada, ni siquiera Chaves y Griñán, dos expresidentes de la Junta. Y un jamón. Cientos de millones de euros sin control, y todo un presidente sin saber nada. Dos, en este caso. Curioso, porque casi todos los andaluces conocen el caso de algún beneficiado por los ERE, de alguien que recibió un dinero extra o una jubilación de lujo sin haber bajado nunca, por ejemplo, a una mina. Aunque haya condenas, esta es una de las muchas vergüenzas que hemos pasado los andaluces con los que aún se creen los dueños del cortijo. ~