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Pepe Mel, Patricia Ramírez y Antonio Viola, en la presentación de ‘Así lideras, así compites’. / Manuel Gómez
Los últimos días me han servido para aprender un poco más sobre el trabajo en los vestuarios, su gestión o cómo interpretar muchas de las cosas que ocurren. Y todo gracias a la lectura de un libro que no sólo se aplica al mundo del fútbol y que a usted, si trabaja en equipo, le puede venir de perlas. Como le vino a Mel, no el libro, sino la teoría que en él se expone. Ayer, Patricia Ramírez presentó su cuarta obra: Así lideras, así compites. Sí uno lo lee entiende muchas de las cosas que pasan o pasaron en el vestuario del Real Betis Balompié bajo la dirección de Mel y con el trabajo de Patricia.
Ahora entiendo por qué el madrileño se encomendó a la conocida psicóloga deportiva. Sus teorías, tan reales como la vida misma, fueron puestas en prácticas hace no mucho tiempo en el Betis y vaya si les sirvió. Analice, sino me cree, los resultados deportivos durante aquella etapa...
Aún más curioso es saber por qué no continuó haciéndolo o cómo se le comunicó una decisión todavía incomprensible. Pero eso, a dios gracias, parece difícil volver a verlo en una entidad que poco a poco recupera el rumbo. Quizás sea también el momento de recuperar a gente válida que podría aportar mucho, como es el caso.
Ojalá ese equipó pueda volver a disfrutar del trabajo de quien sabe y puede y que, además, supone una herramienta más para el entrenador, que otra cosa no, pero confianza en el trabajo de esta mujer tiene y mucho. Por algo será...
Menos palos y más zanahoria, comprensión y, sobre todo, liderazgo. El que muestra quien tuvo que regresar para enderezar una situación que vaya usted a saber cómo hubiese terminado si no se hubiera dado el caso. Tiempo hay para construir y se están dando los pasos: a poner ladrillos.