Mirarse el machismo

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08 may 2018 / 08:30 h - Actualizado: 08 may 2018 / 08:30 h.
"Laboratorio ciudadano"

Los hombres tenemos que mirarnos el machismo, el comportamiento sexista inoculado por siglos y siglos de patriarcado y dominio masculino en todos los ámbitos de la vida. Necesitamos una terapia colectiva que nos haga ver el sexismo que impregna nuestro comportamiento cotidiano hasta en las acciones aparentemente más irrelevantes.

En los casos más graves, se requerirá una terapia individual que ayude a erradicar conductas violentas que, abordadas a tiempo, pueden tener arreglo. Esta columna es mi contribución individual a la lucha feminista por una sociedad más igualitaria, al esfuerzo individual y colectivo que debemos hacer los hombres porque la solución del problema está en nosotros, que somos los machistas, no en las mujeres.

Las religiones son sexistas, el poder político y económico también lo es y la educación, por supuesto. En este contexto tan abrumador, no basta con unos cambios legislativos al hilo de la actualidad y unas declaraciones de urgencia. Hay que plantearse una transición a la igualdad en todos los terrenos, como se ha planteado una transición digital y una transición energética hacia las energías limpias.

El machismo y el machotismo tienen raíces muy profundas en el universo mental de los hombres: desde el temprano imperativo «los hombres no lloran» al «quien bien te quiere, te hará llorar» que rezuman crueldad mental y son la antítesis de una correcta educación emocional. Por cierto, ya funciona la Asociación Española de Educación Emocional (www.asociacionasedem.org) que se presenta este mes en Sevilla.

Ahora, cuando algunos muy poderosos se empeñan en resucitar los negros fantasmas del racismo, el clasismo, la intolerancia y la violencia y otros en blanquear la discriminación y la segregación por sexos con eufemismos como la «educación diferenciada», hay que recordar que el camino hacia la igualdad se debe hacer juntos, cogidos de la mano, los hombres con las mujeres.