Primarias, de fiesta de la democracia nada

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06 may 2017 / 21:06 h - Actualizado: 07 may 2017 / 10:14 h.
"PP","PSOE","Susana Díaz","Juanma Moreno"

No hay nada más lejano a una fiesta de la democracia que las Primarias que se celebran en el seno de los partidos políticos cuando, en realidad, no deja de ser un extraordinario procedimiento que fomenta la participación directa de los militantes en la toma de decisiones trascendentales para sus respectivas organizaciones. Para eso se pensaron, para revitalizar así a los partidos políticos dando un protagonismo destacado a sus bases que hasta ahora ocupaban un papel muy secundario. Sustancialmente así está ocurriendo. En el caso del PSOE, la militancia cobra una especial relevancia ya que depende de la misma el rumbo que adoptará su partido en el futuro según la opción por la que se incline el próximo día 21 de Mayo.

Al margen de la evolución propia de cada una de las candidaturas que entran en liza, lo realmente llamativo es la virulencia con la que se emplean en los círculos más próximos a cada uno de ellos para tratar de debilitar al contrincante. No es normal el nivel y el tipo de descalificaciones que se vienen vertiendo en las redes sociales por no decir de otros que se dedican con pasión a recolectar viejas historias para poner en marcha el ventilador, recurso ya más que manido y que lo único que consigue es enrarecer aún más el clima en el que se desarrolla este episodio. Y eso que estamos sólo al principio después de superarse mejor de los que se esperaba el capítulo de la presentación de avales. También aquí se apuntaba hacia un gran escándalo pero, al final, nada de eso ha sucedido sin que se hayan producido hechos bochornosos e inconfesables de captación de apoyos que luego no eran tales. Las incidencias han sido mínimas, lo cual es ya de por sí realmente meritorio a pesar del nivel de belicosidad que se viene observando entre los contendientes.

Sucede, además, que el dramatismo que envuelve esta elección a la Secretaria general del partido puede alargarse en el tiempo si se tiene en cuenta que luego habría que repetir este paso para la designación del candidato a la Presidencia del Gobierno, una especie de bucle sin fin que amenaza con eternizar la discusión interna en el seno de los socialistas. Lo cierto es, en definitiva, que nos aprestamos a vivir una recta final de dichas primarias en donde se va a intensificar el enfrentamiento y en la que el planteamiento de propuestas quedará en un segundo plano prevaleciendo, sobre todo, el navajeo y el cuerpo a cuerpo. Si no se impone la sensatez puede que asistamos a todo un espectáculo que podría prolongarse más allá de la elección en sí cuestionándose, incluso, hasta el resultado final que se obtenga.

Ahí está lo ocurrido en el PP de Sevilla en donde todavía persisten las dudas proyectadas por la propia dirección del partido sobre la elección de Virginia Pérez como presidenta provincial por un puñado de votos de diferencia con respecto al otro candidato, Juan Bueno. Se cuestiona todo, incluso, la capacidad de supervivencia de una formación fracturada por la mitad por mucho que se haga ahora estableciendo órganos de gobierno interno con representantes de los dos sectores enfrentados. Algo de eso puede verse, también, en el PSOE en donde resulta difícil imaginar una confluencia de voluntades dado el grado tan intenso de confrontación que se está produciendo a cuenta de estas primarias. Por eso, a aquellos que pudieran considerar, con cierta ingenuidad, que estamos ante una verdadera fiesta de la democracia, habría que ponerles delante de sus ojos estas evoluciones, marcadas por la crispación y la zancadilla, para recordar que, más bien, estamos ante un difícil trance que amenaza con la propia existencia en condiciones de un partido con vocación de gobierno pero, al mismo tiempo, con una tentación suicida permanente. ~