Ganó Trump y quedó clarísimo que todas las encuestas previas fracasaron estrepitosamente. Luego siguió el otro fracaso: el de los medios de comunicación españoles, donde las seudo tertulias hicieron el ridículo. Ni idea.
Con el triunfo de Trump quedan aclarados los siguientes conceptos: 1) Las clases medias norteamericanas han mandado a la mierda al sistema político. 2) Si Trump pretende cumplir sus promesas electorales, es hombre muerto... 3) Un hombre de empresa, o mejor dicho, un hombre de presa, ha vencido a los políticos al uso. 4) En Europa no se quieren enterar de lo que significa el triunfo de Trump, que en síntesis es el triunfo de los desesperados, de los desengañados, de los hartos de sinvergüenzas... 5) En España somos europeístas... 6) Con Trump hemos llegado al límite de la paciencia social y política y el mundo ya sabe por dónde tirar. Y 7) Con el triunfo de Trump las Bolsas no han caído como decían.
Las clases medias norteamericanas han dicho basta a casos como el del portugués dirigente europeo que se jubila con 18.000 euros mensuales y luego se busca un enchufe en la multinacional agradecida... Los 18.000 euros los pagamos usted y nosotros...
Como pagamos a todos los enchufados que hay en la Unión Europea, que se jubilan con 50 años y una pensión de 9.000 euros mensuales... La misma Unión Europea que ha fracasado con los refugiados de África y Oriente Medio y todavía tiene la hipocresía de imponernos a los ciudadanos sus tropelías.
Pero los miles de muertos ahogados en el Mediterráneo caerán sobre sus cabezas... Al tiempo.