Animal rastrero / Escoria de la vida / Adefesio mal hecho/ Infrahumano».....
No va dirigido a una persona pública o a cualquier vecino malaje que toca el saxofón a la hora de la siesta, es la letra de un bolero que muestra cómo ya no existe marcha atrás cuando todo el amor se convierte en bilis y el objeto de nuestra ternura se convierte en un monstruo. «Espectro del infierno / Maldita sabandija/ Cuánto daño me has hecho / Alimaña/ Culebra ponzoñosa / Desecho de la vida/ Te odio y te desprecio». Es curioso que esta tremenda letra está escrita por un músico mexicano nacido en el estado de Veracruz: Norberto Eduardo Toscano, feliz padre de una familia con ocho hijos, que refiere que su mayor alegría es haber podido mantener a su familia de forma digna con los derechos de sus letras y canciones.
«Rata de dos patas / Te estoy hablando a ti / Porque un bicho rastrero / Aún siendo el más maldito / Comparado contigo / Se queda muy chiquito». Esta increíble letra tiene una versión realizada por la más brava de todas las cantantes mexicanas: Paquita la del Barrio.
Era una mujer singular que, en palabra de su biógrafa Cecilia Pujals, «se convirtió en la voz latina más convincente a la hora de cantarle a la amargura de la traición y a la falsedad del cariño de los hombres. Los ritmos románticos del bolero, la ranchera y la tambora, y cantidades suficientes de su frase célebre, Me estás oyendo, inútil, estratégicamente ubicadas en la parte medular de sus canciones, han sido las marcas que han acompañado, desde hace casi dos décadas un discurso que no deja de escandalizar a la sociedad, que a pesar de todo sigue siendo machista».
Montó una cantina en la colonia Guerrero, en Ciudad de México, donde todos los jueves presenta un actuación llena de canciones contra los hombres y sobre todo arenga a las señoras a ejercer su derecho a tomar la iniciativa a la hora del amor. Las propuestas indecorosas también son parte de la vida y de su repertorio.
«Maldita sanguijuela / Maldita cucaracha / Que infectas donde picas / Que hieres y que matas / Alimaña / Culebra ponzoñosa / Deshecho de la vida/ Te odio y te desprecio...».
Pero también músicos de los más diferentes estilos versionan esta canción única: Fito Páez, Andrés Calamaro, Alberto Plata o Sartenazo Cerebral. Todos, atraídos por una letra que compendia el desprecio y nos hace pensar qué se debe de sentir cuando se entona ésta contra alguien, pues nuestro corazón se hundió en una fosa sin fondo de odio.