Los sentimientos son esos estados mentales que nos hacen sentirnos verdaderamente humanos, son los que nos hacen sufrir, gozar y vivir, pero es la utilización crítica del sentimiento lo que nos hace diferente los unos a los otros, triunfar, fracasar o pasar por la vida sin pena ni gloria. El sentimiento crítico se define como el uso reflexivo de los sentimientos que se centra en evaluar la información y guiar la atención y la acción en función de quellos valores que queremos implementar tanto como medios como fines. Así por ejemplo, cuando queremos quitarnos el miedo usamos los sentimientos como un fin. Sin embargo cuando usamos los sentimientos como información para valorar lo que sabemos sobre nosotros mismos los estamos usando como medios y otras veces los sentimientos se usan tanto como medios y como fines. Las ventajas funcionales de poder utilizar el sentimiento crítico es que nos permite interrumpir o parar los sentimientos inapropiados que a veces tenemos, suprimiendo voluntariamente esos sentimientos, descansando, distrayéndonos, parándonos y pensando, etc. Algo que a veces es muy necesario hacer. Otras veces nos permite extraer la información apropiada utilizando los sentimientos como información para corregir la información errónea para discriminar bien lo que queremos o necesitamos aprender sobre los sentimientos. El sentimiento crítico nos permite cambiar nuestro contexto mental para implementar nuestros valores, cambiar de contexto, y algo muy importante para crecer y mejorar nuestras relaciones, ser capaces de detectar los ambientes más idóneos para que nosotros podamos desarrollar nuestras ideas. De igual manera el sentimiento critico nos permite compartir información para poder cambiar nuestros estados internos y poder planificar, imaginar, simular, o condicionar nuestra acción. El sentimiento crítico también nos permite cambiar nuestros valores, nuestros niveles de aspiración y ajustarnos apropiadamente a nuestra conducta. Sentir críticamente nos hace ser un ser humano evolucionado y se aprende a través de la reflexión emocional, no olvide que los sentimientos no engañan nunca, los pensamientos si pueden engañarnos, es el engaño intelectual que existe y al que los sentimientos acotan.