Tonterías de la tía Carlota

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01 jul 2017 / 21:29 h - Actualizado: 01 jul 2017 / 21:37 h.
"La trastienda hispalense"

Julio, el gran César del calendario gregoriano y el emperador del almanaque que cuelga de una alcayata en las cocinas de nuestras casas, llega a Sevilla con el mito del «más caluroso» del año, pero eso –como diría Paco Gandía– son tonterías de la tía Carlota, que más calor hace guisando papas en amarillo o alicatando un volcán... Y para amainar el temporal de sofoco, Sevilla guarda en el baúl de los desavíos numerosas recetas de nuestros mayores que van desde el buen manejo de los abanicos hasta saber callejear, cual si jugáramos al tejo, por las umbrías, penumbras y velas de la ciudad, pasando por el paseíto por las recoletas juderías, viejas y nuevas, a la búsqueda del bendito velador bajo palio de naranjos en fresquitas esquinas sombrías y sabor de cerveza helada del Humilladero de calle Oriente.

María Luisa Fernanda siempre fue el remedio para los ahogos del estío... Los jardines que eternizan su nombre y que el paisajista francés Claude Nicolás Forestier tan estéticamente diseñara para nuestra ciudad, son el bendito bálsamo de oxigeno que, entre ranas y leones, se necesita para olvidar que, en el exterior de su arboleda, Julio nos acosa con su fragua de Vulcano al rojo vivo, razón de más para buscarse la vida entre lebrillos de gazpacho, tomates con sal y los pinreles metidos en el agua de las orillas del río.

Y ojo, que aún nos queda leña hasta San Miguel... Regimientos de carros y carretas de percherones con tanques en salmuera y búcaros a gollete aliviando la tierra resecada de nuestros pasos en julio del Carmen, de Santa Justa y Rufina, de Santiago y Santa Ana, Velá de por medio, y de unos versos machadianos en el Alba de las Dueñas: Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla y un huerto claro donde madura el limonero.

El Cristo de San Agustín será agasajado de nuevo, hoy en San Roque, por el alcalde Juan Espadas y sus munícipes, entre mazas y policía municipal de gala, para cumplimentar el rito anual de renovación de gratitud por la extinción de la peste que infectó a Sevilla en 1649, al mismo tiempo que uno de los nuestros, José Manuel Soto, celebrará su 30 aniversario en el emblemático y longevo Teatro Real de la capital de España, coincidiendo con el acto de clausura del WorldPride en la Puerta de Alcalá, en la que Madrid entregará el testigo a la ciudad de New York... Y ya hablaremos de agosto, largo y tendido, después de que besemos la mano de Santa Marta... ¡Qué me gusta el verano hispalense! ~