El verano en bolsa es habitual la elevada volatilidad y este verano no es una excepción.
Este verano la habitual volatilidad viene acompañada de ciertos riesgos: la ruptura del acuerdo de Estados Unidos y China en el G20, la debilidad en los datos macro de la zona euro, la intensificación del Brexit, la ruptura de la coalición en Italia y la crisis política en Argentina.
La FED emprenderá dos bajadas de tipos adicionales para éste año y el Banco Central Europeo podría hacer un recorte en septiembre, además de implementar el programa TLTRO y anunciar algún nuevo instrumento. En la última sesión del viernes vivimos recuperaciones en los principales índices por una posible puesta en marcha de nuevas medidas de estímulo en septiembre por parte del Banco Central Europeo.
Alemania, tras la contracción del Producto Interior Bruto en el segundo trimestre, está planteando un programa para inyectar 50.000 millones de euros para reactivar el gasto en la economía, este planteamiento será bien recibido por los mercados.
La libra consolida su primera semana positiva respecto al euro después de 14 semanas negativas y se revaloriza un 2% semanal, aunque su comportamiento estará ligado a la evolución política de salida de Europa.
El viernes conocimos la balanza comercial de la Unión Europea y los permisos de construcción en Estados Unidos, ambos por encima de lo esperado por el consenso.
Hoy conoceremos el IPC correspondiente al mes de julio de la Unión Europea, el miércoles los PMI´s de los principales países de la Unión Europea y el viernes se celebrará la conferencia anual de Jackson Hole donde los principales banqueros centrales discutirán su estrategia monetaria.
Los índices europeos arrancan con subidas el Ibex sube un 1,06%, el DAX alemán un 0,96%, el Eurostoxx un 1,02% y el CAC un 0,88%.
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