Hace treinta años que pedimos al Ayuntamiento de Sevilla que dedicara una calle a Saturnino Barneto Atienza. Luego lo hemos repetido en varias ocasiones a todos los Ayuntamientos que se han sucedido. También lo pedimos para otras dos personas ejemplares, como Pepe Díaz Ramos y Melchor Rodríguez García, y gracias a Dios lo conseguimos. Pero Barneto sigue pendiente.
Ahora lo suplicamos al nuevo alcalde de Sevilla. Se lo pedimos en nombre de una octogenaria ya fallecida, su hija Rosario Barneto, a la que prometimos que, mientras tuviéramos vida, no dejaríamos de defender la memoria de su padre.
La calle que recuerde a Saturnino Barneto es de fácil elección. Basta reducir un poquito el recorrido de la actual calle José Díaz y dedicárselo a Barneto. Y así estarían juntos en el nomenclátor como lo estuvieron en vida.
Pepe Díaz como Melchor Rodríguez y Saturnino Barneto fueron líderes izquierdistas, personas que dedicaron su vida a luchar por los intereses de los obreros. Pero todos provenían del anarquismo decimonónico, del de antes de 1910, cuando se fundó la CNT. Y esa procedencia anarquista nunca fue perdonada a Barneto por sus compañeros del PCE.
Nosotros hemos dado a conocer las vidas de estos personajes claves del sindicalismo sevillano, poniéndolos como ejemplos de personas responsables de sus deberes cívicos en tiempos difíciles, y habiendo pagado ellos y sus familias durísimas represalias.
En memoria de Rosario Barneto y el sindicalismo, suplicamos al alcalde don Juan Espadas, que Barneto tenga calle en Sevilla.