Comportamientos intolerables

Image
17 feb 2018 / 23:45 h - Actualizado: 17 feb 2018 / 23:45 h.
  • Comportamientos intolerables

Las noticias sobre conductas impropias, indignas, reprochables e injustificables, de parte del personal de Oxfam y de Médicos sin fronteras que se han conocido durante los últimos días, pueden convertirse en un verdadero problema para las propias ONG’s y, lo que es mucho peor, para las personas que siendo la parte más vulnerable del problema aprovechan los servicios que prestan estas organizaciones sin las que tendrían verdaderos problemas de supervivencia. Los que contratan prostitutas en pleno servicio humanitario o los que montan orgías en las mismas circunstancias, incluyendo menores entre las invitadas, son verdaderos peligros para la parte más pobre por razones obvias y porque dinamitan la confianza de millones de personas que tienen puesta su confianza en estas organizaciones y pueden dejar de colaborar.

Estamos hablando de un porcentaje bajísimo de personas. Son muy pocos, pero el daño que pueden llegar a causar es extraordinario. No se puede olvidar que estos sujetos representan a organizaciones que crecen y funcionan desde el respeto más absoluto a la entereza ética y moral, desde un concepto de mundo en el que la dignidad de las personas está por encima de cualquier otra cosa. Es por ello por lo que la repugnancia que puede generar un hecho cualquiera, si se produce en el seno de estas organizaciones, se convierte en algo inaguantable, intolerable y motivo de rechazo general.

Por si era poco, el presidente de Oxfam internacional era detenido hace unas fechas en Guatemala por un caso de corrupción que tiene que ver con el Gobierno de ese país centroamericano.

Las dimisiones que se han producido están muy bien y eran obligadas. Que se retiren las subvenciones a las ONG’s envueltas en escándalos podría entenderse. Lo inexplicable sería que no se estudiasen medidas de control suficientes como para que algo así no vuelva a suceder.