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La exalcaldesa de Bormujos Ana Hermoso, durante su último proceso judicial. / Efe
La exalcaldesa de Bormujos Ana Hermoso volverá nuevamente a los juzgados. Un año después de que el TSJA anulara la pena de seis meses de cárcel impuesta por un delito de cohecho al aceptar un bolso de Loewe en «agradecimiento» a su apoyo a la moción de censura consumada en 2005 para expulsar al PSOE de la Alcaldía, Hermoso acudirá este martes al juzgado de instrucción número 13 de Sevilla por otro embrollo judicial: el presunto abono por duplicado (2012 y 2015) de la paga extra de Navidad a la plantilla municipal pese a estar prohibido por la ley de estabilidad presupuestaria que impulsó el Ministerio de Hacienda. El primer abono se realizó por pagos mensuales ordenados desde Alcaldía, con la ley ya en vigor, mientras que el segundo pago tuvo lugar una vez que Montoro diera en 2015 luz verde para que los funcionarios recuperaran la extra y el Consistorio abonara de nuevo en dos ingresos –febrero, aún con Hermoso en el poder, y septiembre, ya con el gobierno socialista— el 50 por ciento de la extra.
El caso se remonta a verano de aquel año, cuando el departamento de Cristóbal Montoro impuso medidas de ajustes para los consistorios, entre las que figuraba la eliminación de la paga extra. Según la documentación que obra en poder del juzgado, diez días después de aplicarse tales medidas, se emite una resolución de Alcaldía por la que se asignan productividades al personal empleado –laboral y funcionario– casi de forma generalizada, fórmula que se repite cada mes hasta diciembre de 2012. Se trataban de «seis cuotas iguales» que sumadas supondría «el importe íntegro de la paga extra» de Navidad «pese al mandato expreso legal de no abonarse». El departamento de Personal municipal definía estas partidas como «productividad Real Decreto Ley 20/2012», en alusión a la ley de Hacienda.
Esta práctica fue reprobada a través de un informe de Personal, que avisaba de la «existencia de anomalías e irregularidades» y también recibió reparos de la Intervención municipal, que consideraba que «no estaban ni motivadas ni justificadas».
Cuando se levantó el veto y los ayuntamientos ya podían pagar este concepto, según la denuncia presentada por el actual alcalde, el socialista, Francisco Molina, el Ayuntamiento de Bormujos volvió a pagar la extra de Navidad de 2012 a sus funcionarios. A través de una resolución fechada el 24 de febrero se abonó una partida que representaba el 24 por ciento del total. Ya con cambio de color político –el PSOE recuperó la Alcaldía en detrimento del PP–, se procedió a abonar en diciembre de 2015 el importe de otro 26,23 por ciento de los importes dejados de percibir en 2012. La razón esgrimida por este gobierno es el desconocimiento de las prácticas llevadas a cabo por Hermoso, que abonó la paga sin consultar antes a la corporación.
Tras conocer estas prácticas, hicieron las preceptivas peticiones informes tanto a Intervención como al Consejo Consultivo de Andalucía, para ver si Hermoso había incurrido en un delito. La denuncia la presentó Molina finalmente en julio, bajo la sospecha de que su antecesora podía haber incurrido en posibles delitos de prevaricación y malversación de caudales públicos.
Hermoso, que desde el inicio del proceso ha defendido la legalidad de las productividades, se ve inmersa en un nuevo proceso judicial después de que la Audiencia de Sevilla la condenara por cohecho, fallo anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.