Corneta y tarbina en el corazón del Furraque

El VIII Certamen de Marchas Procesionales que organiza la hermandad de la Vera Cruz de Los Palacios se consolida este año con el mayor número de bandas de su historia

Álvaro Romero @aromerobernal1 /
25 feb 2018 / 07:07 h - Actualizado: 25 feb 2018 / 07:07 h.
"Música","Cuaresma"
  • La Agrupación musical Santísimo Cristo de la Antigua (Espera) / A.R.
    La Agrupación musical Santísimo Cristo de la Antigua (Espera) / A.R.
  • Corneta y tarbina en el corazón del Furraque

La Laguna de Caro es la retaguardia del Furraque, el postigo de una hermandad de 3.000 cofrades que supone casi la mitad de la Semana Santa palaciega, pues saca a la calle al Señor con más nazarenos del pueblo, El Cautivo, el Martes Santo; y a la Señora con más devotos de Los Palacios y Villafranca, la Virgen de los Remedios, el Jueves, detrás del Santísimo Cristo de la Vera Cruz. En ese ensanche de postigos antiguos en el corazón de Villafranca de la Marisma era este sábado la octava vez que se organizaba un Certamen de Marchas Procesionales en el corazón mismo de la Cuaresma, y la ocasión en que más bandas han acudido a la llamada: nada menos que ocho, que ofrecieron desde mediodía un concierto de marchas para dibujar en el aire las notas que se avecinan para finales de marzo.

El público, que ocupó la trasera de la capilla de San Sebastián, disfrutó de la música que va tocando mientras la propia hermandad consolidaba asimismo otra tradición que da nombre al encuentro: la Tarbiná, de tarbinas, unos buñuelos que se reparten gratis entre quienes consumen las otras tapas y bebidas que prepara la hermandad para lo que supone un gran día de convivencia.

Como bandas anfitrionas, tocaron las dos de casa: primero la infantil de cornetas y tambores Santísimo Cristo de la Vera Cruz, que es una auténtica escuela de músicos amparada por la hermandad y que, aunque nació en 2004, ha dado el verdadero salto cualitativo hace un par de años. Y, para cerrar, ya en una tarde que encapotó un día estupendo, la banda adulta del mismo nombre, la más antigua del encuentro a excepción de la banda de música Ciudad de Utrera, que nació en 1993, y desde luego la más numerosa, con unos 120 miembros. Los músicos de la localidad vecina interpretaron sus sones cuando más público había a eso de las tres de la tarde, varios centenares de personas.

«Se trata ya de una tradición cuaresmal en el pueblo que no puede faltar: ni por la música ni por las tarbinas», bromeó el hermano mayor de la Vera Cruz, Juan Gavira, encantado con la alta participación de público y bandas en este prólogo musical de la Semana Santa palaciega del disfrutaron también varios concejales del gobierno municipal, como Carmen María Molina, primera teniente de alcalde.

También de Los Palacios y Villafranca intervino la Agrupación musical Santa María la Blanca, renacida en 2010 bajo la batuta de Manuel Díaz Bucarat y que ha progresado tan rápidamente que ya tiene en la calle un trabajo discográfico grabado en directo en el Miércoles Santo de Málaga: Al compás de Santa María. De Coria del Río llegó la Agrupación San Lucas Evangelista, que preside desde 2012 Pedro Recuerda y dirige Jesús Diéguez. Sus solemnes composiciones adelantaron la seriedad que se barrunta en la Semana Mayor. Otras bandas que también acudieron a la llamada del Furraque fueron la del Santísimo Cristo de la Antigua, de Espera, y nacida hace apenas cuatro años por iniciativa del propio Ayuntamiento, o la de cornetas y tambores San Juan Evangelista de Las Cabezas, cuyo centenar de componentes continúa bajo el amparo de la Hermandad cabeceña del Nazareno y la batuta de Manuel Ramírez Márquez El Poeta. De Ronda, llegaron los músicos de la banda de música Arunda (nombre latino de la ciudad del tajo), que dieron igualmente muestras de calidad cofrade pese a su corto recorrido en la última década.