Écija recupera los semáforos para el examen de conducir

La señal es a demanda, para no distorsionar el tráfico en la avenida del Genil

31 ene 2017 / 15:34 h - Actualizado: 01 feb 2017 / 09:48 h.
"Tráfico"
  • Un ecijano hace uso del nuevo semáforo ubicado en la avenida del Genil. / M.R.
    Un ecijano hace uso del nuevo semáforo ubicado en la avenida del Genil. / M.R.

Desde que en junio de 2013 se apagó el semáforo de la avenida Miguel de Cervantes, a la altura del parque infantil, Écija no tenía ninguna de estas señales luminosas para regular el tráfico. El cruce que presidía el semáforo eliminado iba a ser convertido en una glorieta y eso hacía inservible este elemento, cuyo apagado fue presentado como un hecho histórico, retransmitido por televisiones nacionales que recogieron cómo el alcalde de entonces, Ricardo Gil-Toresano (PP), pulsaba el botón que extinguía la luz del semáforo en cuestión.

Casi nadie reparó entonces que al quedarse sin semáforos, Écija se podía quedar también sin la sede para hacer los exámenes de conducir de la comarca y de localidades cercanas. Incluso sin la posibilidad de que las autoescuelas de municipios de los alrededores hicieran las prácticas del carnet de conducir en las calles astigitanas. Sin semáforos, no había exámenes. Contar con un semáforo es una condición sine qua non para que el examen de conducir se siguiera celebrando en Écija.

Tres años y medio más tarde, la ciudad tiene ya un semáforo para continuar siendo sede de esos exámenes prácticos. Con cargo al Plan Supera IV que pone en marcha la Diputación de Sevilla se ha regulado con un punto semafórico un paso de peatones elevado en la avenida del Genil con vistas a mantener la prueba práctica en Écija como pedían autoescuelas y la Dirección General de Tráfico (DGT).

El semáforo instalado –dos, en realidad– regula un paso de peatones en la puerta de acceso al aulario de infantil del colegio público Miguel de Cervantes. «No es un punto semafórico como tal, pero dada la densidad de tráfico en la avenida del Genil y la proximidad del colegio, hubo técnicos de la DGT que nos dieron el OK a este punto como lugar adecuado para instalarlo», explica la concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad del Ayuntamiento ecijano, Rosa Pardal.

La edil apunta que «Écija es una ciudad que está bien regulada de tráfico», pero necesitaba este punto semafórico «que fue demandado por Tráfico» y por las autoescuelas. «Está en una zona bastante saturada de tráfico», señala Pardal, «y si lo colocábamos como en cualquier otro sitio iba a provocar muchas retenciones».

Por eso es un semáforo a demanda, que se acciona cuando un peatón necesita cruzar. Si no se solicita, no interrumpe el tráfico rodado, un método admisible para el examen de conducir, según el Gobierno local del PSOE. La señal luminosa va a estar en doble ámbar continuamente salvo que el peatón necesite cruzar, para lo que deberá pulsar el botón del semáforo «y en segundos se pone en rojo para los vehículos y en verde para que pase el peatón, que tiene unos once segundos para hacerlo», dice Pardal. La luz verde viene además acompañada de señales acústicas para personas invidentes.

El punto elegido es donde menos distorsión puede provocar el semáforo en el flujo de tráfico y donde mayor seguridad puede dar a personas que cruzan la avenida del Genil, según el equipo de gobierno, que sostiene que el nuevo elemento favorece el tránsito y da seguridad al colegio cercano sin distorsionar el tráfico.

No todo el mundo está de acuerdo. Hay responsables de autoescuelas locales que proponen otros lugares donde hubiera sido más apropiado colocar este semáforo. Algunos proponen la avenida del Ferrocarril, el Camino del Físico o la Ronda de San Agustín, vías «más conflictivas para la circulación» en que un elemento de este tipo puede regular la incorporación de automóviles desde calles perpendiculares que «se hace supercomplicado para los alumnos ahora mismo». Con todo, la mayoría reconoce que «está bien que tengamos ya uno, y si Tráfico lo avala... pero deberían haber dejado alguno en lugar de quitarlos hace años».

La novedosa regulación de este punto de la avenida del Genil no ha pasado desapercibida. Algún que otro conductor se ha saltado la luz roja, quizá por no estar acostumbrado a encontrarla en este lugar. Tampoco ha faltado la broma entre los técnicos municipales y los miembros del Gobierno local que han asistido a la puesta en marchar del nuevo semáforo. «Otros inauguran aeropuertos, nosotros somos más humildes e inauguramos un paso de peatones con semáforo», reían.

La instalación de estos semáforos ha costado unos 34.000 euros, una inversión «para amarrar los exámenes prácticos para la ciudad por lo que suponen», enfatiza el concejal de Gestión del Espacio Urbano, Sergio Gómez. «Es de gran importancia para Écija ser centro de exámenes prácticos por la cantidad de autoescuelas que vienen aquí y por cómo eso repercute económicamente en nuestra ciudad», señala el concejal.