El conflicto familiar sale de casa a la escena

Unas jornadas organizadas por el Ayuntamiento de Tomares ayudan a resolver de la mejor manera posible los problemas más frecuentes entre padres e hijos a través del teatro

24 oct 2016 / 15:31 h - Actualizado: 25 oct 2016 / 07:55 h.
"Teatro","Educación"
  • El salón de plenos del Ayuntamiento acogió la primera sesión de ‘La familia a escena’. / Pepo Herrera
    El salón de plenos del Ayuntamiento acogió la primera sesión de ‘La familia a escena’. / Pepo Herrera
  • Una de las puestas en escena de los problemas que se viven en las familias tomareñas. / H.P.
    Una de las puestas en escena de los problemas que se viven en las familias tomareñas. / H.P.

«Mi hija no quiere ponerse chándal y cuando le toca gimnasia en el colegio la tenemos montada en casa», lamenta Esther, madre de una niña de tan solo seis años que ya da problemas con un tema tan cotidiano como es la vestimenta. Este conflicto lo han vivido, según admiten levantando la mano, al menos otras 15 madres de la treintena de participantes en La familia a escena, unas jornadas organizadas por el Ayuntamiento de Tomares, en colaboración con las AMPAs de la localidad, en las que a través de la psicoescénica se enseña a las familias a resolver los problemas más habituales que se tienen con los hijos durante la infancia y la adolescencia.

Y aunque este tipo de actividades para padres existen en muchos otros sitios, lo original de esta reside, precisamente, en que los conflictos familiares que se describen salen de casa y dan un salto al escenario improvisado en el que se convierte el salón de plenos del Ayuntamiento. Por eso, Esther no solo cuenta el problema con su hija en voz alta a modo de desahogo sino que, de la mano del actor de la asociación Ponte Antonio Reina y de la actriz de la asociación HazTuAcción Cristina Nollet, será ella misma la que recree la escena delante de todos, reviviendo el momento en el que la pequeña –interpretada por Nollet– no entra en razones por mucho que la madre insista:

-¡Que no quiero, mamá!

-¡Pero si no puedes hacer gimnasia con falda!

-¡Que me da igual, que no quiero, que no me gusta!

-¿Por qué? Mira que como no te lo pongas...

Y así un buen rato, hasta que Esther tira la toalla y busca con la mirada a Reina para que este analice la escena que acaba de ver y sugiera la mejor forma posible de resolver el problema. «La psicoescénica no hace más que aplicar el teatro a la resolución de conflictos, que es el plano desde el cual trabajamos, además de ser una herramienta para poder limpiarte emocionalmente», asegura Reina, quien también usa esta técnica en diferentes programas destinados a la familia y puestos en marcha por la Junta.

«Siempre trabajamos desde el conflicto, que es el motor del cambio. A diferencia de la sociedad, que siempre premia el acierto, en esta técnica potenciamos mucho el fallo, porque este te permite evolucionar, crear algo nuevo», apunta este actor que también ejerce de psicólogo a la hora de tratar con los participantes. Porque al comienzo de la sesión, antes de que algún padre se decida a romper el hielo y salir a escena, hay que ganarse su confianza: «Al principio es difícil que se abran con tanta gente, porque muchos se exponen tanto que llegan a llorar delante de todos, por eso es necesario hablar mucho, crear un clima en el que se sientan cómodos y que salgan a la escena protegidos». Lo mismo sucede con los propios niños, porque esta psicoescénica, a través de otros programas, también se aplica en institutos y colegios para prevenir, por ejemplo, el acoso escolar.

Para los organizadores, uno de los momentos más satisfactorios de estas sesiones –que ya se realizaron el año pasado y que se repiten este lunes 24– es cuando hay padres que repiten de un año a otro, porque ellos son los mejores embajadores de la iniciativa: «Yo conseguí entender qué pasaba por la cabeza de mi hija, aprendí a gestionar sus sentimientos y, cada vez que se crea un conflicto en casa, lo veo como una oportunidad de acercamiento», asegura uno de ellos.

Y es que es precisamente eso lo que pretende La familia a escena, «aprender a educar a nuestros niños y prevenirlos ante la violencia en general y de género en particular», señala Carmen Ortiz, concejal de Bienestar Social y Educación, un área municipal que trabaja codo con codo con las AMPAs de la localidad –las cuales, por cierto se han aglutinado recientemente en la plataforma Entre todas para ejercer una filosofía de trabajo basada en la coeducación, afirma la técnica del Centro Municipal de Información a la Mujer (CMIM) Lola Lamoneda, y con el objetivo de lograr «que la igualdad sea real y efectiva en la localidad».