‘El Cubano’ sobre su víctima: «Era un parásito de la sociedad»

El acusado por el conocido como crimen de la gasolinera denuncia en una carta que le impiden colaborar con la Guardia Civil para destapar una mafia

02 abr 2018 / 21:22 h - Actualizado: 03 abr 2018 / 08:48 h.
"Tribunales"
  • Imagen de algunas de las páginas escritas a mano por ‘El Cubano’ y remitidas a este periódico, como se puede comprobar en el sobre. / El Correo
    Imagen de algunas de las páginas escritas a mano por ‘El Cubano’ y remitidas a este periódico, como se puede comprobar en el sobre. / El Correo

Alberto Hernández Blanco, conocido como El Cubano, es el acusado por el llamado crimen de la gasolinera ocurrido en noviembre de 2015, hechos por los que se encuentra en prisión preventiva. Desde allí ha remitido a este periódico una carta manuscrita pidiendo «ayuda, recurso de amparo, apoyo jurídico, protección judicial y policial» para poder colaborar con la Guardia Civil y la Justicia y destapar así «una mafia internacional» dedicada al tráfico de droga y el blanqueo de capitales, entre otros negocios. En la misiva, fechada el pasado 17 de marzo, llama a su víctima «un parásito de la sociedad», pues según cuenta «es el hermano del jefe principal de esa mafia».

Hernández Blanco, que es un exmilitar cubano de un cuerpo de élite y que logró escabullirse de la Policía durante días en pleno campo, escribe desde la prisión de Puerto III (en el Puerto de Santa María) y la carta llega justo el mismo día en el que se ha elegido el jurado que a partir de hoy le juzgará, junto al que era su patrón, por haber matado a este hombre. «Un capo de la droga, traficante de armas de fuego, secuestrador de las personas que no pagan, traficante de tabaco en grandes cantidades en toda Andalucía; robo de coche, furgonetas, camiones, encargado de utilizarlo para el tráfico y después desguazarlo para venderlo en la chatarrería; tráfico de droga en cantidades, robo de maquinaria industrial y blanqueo de dinero en cantidades y prestamista», es la completa definición que hace del fallecido, que murió tras recibir un disparo realizado por El Cubano después de que se entablase una discusión entre la víctima, tres personas más que le acompañaban, y su patrón en una finca de Carmona.

Dos folios escritos a doble cara, con mayúsculas y plagados de falta de ortografías en los que explica que «este ciudadano» era «un parásito de la sociedad y es el hermano del jefe principal de una mafia y corruptos en la cual es la mafia más grande que hay en toda Andalucía, parte de Europa y Portugal donde esa mafia tiene muchísimo dinero negro, muchísima influencia, muchísimo poder, varios negocios de gran envergadura para el blanqueo de dinero, empresas fantasmas, limusina para alquilar para bodas, comuniones, bautizos, cumpleaños y despedidas de solteros; una peña con una plaza de toros, chalet de lujo con piscina de gran tamaño con cascada de agua, casa de lotería, varios negocios para el blanqueo de dinero, notarios, gestores y abogados corruptos».

Una mafia que según relata está tratando de desenmascarar y en la que se describe como «un fiel servidor de la Justicia». Sin embargo, está encontrando dificultades dentro de la prisión, pues asegura que hay una funcionaria que es la «que lleva todas las documentaciones, alta telefónica, correspondencia a órganos judiciales y policiales» y que trabaja «en el departamento de seguridad» de Puerto III. «Quiero denunciarla por daños y perjuicios, ya que esos documentos se los tengo que enviar al comandante general de la UCO de Madrid que está llevando toda la investigación de esta red internacional de esta mafia, policías corruptos, guardias civiles corruptos, tráfico de armas de fuego, tráfico de cocaína, heroína y hachís, atraco, blanqueo de dinero y muchas cosas más que están bajo investigación por todos los fiscales generales del Estado, todos los tribunales y medios policiales contra el crimen organizado y la corrupción».

«Yo asumo toda mi responsabilidad y si por decir la verdad tengo que ser condenado a la pena máxima por denunciar todo esto que esta funcionaria está violando y abusando del poder para ocultar prueba contra esta mafia en la cual yo no voy a desistir de seguir colaborando con todos los fiscales y todos los medios policiales, aunque me maten aquí dentro por ser de justicia lo que estoy pidiendo, la cual estoy dispuesto a todo. No renunciaré nunca a desmantelar esta mafia y corruptos de la sociedad».

No es de lo único que El Cubano, que llegó a España como refugiado en 1994, acusa a esta funcionaria pues asegura que le ha impedido enviar dichos documentos a una amiga y «de poder tener una cita con mi abogado». Por ello dice que quiere denunciarla por «discriminación de raza por yo ser de color moreno y no ser español» ante la Fiscalía, la Policía, «Derechos Humanos, Amnistía Internacional» y ante televisiones «españolas, europeas y americanas».

Hoy declara ante un jurado popular

La carta de El Cubano, un hombre con una larga historia que incluye su paso por Guantánamo, llega a esta redacción el mismo día en el que en la Audiencia Provincial de Sevilla se elegía a los miembros del jurado que desde hoy le juzgará a él y al patrón de la finca Mataluna de Carmona donde ocurrieron los hechos. Hoy está previsto que arranque el juicio por el llamado crimen de la gasolinera, porque el cuerpo fue trasladado en coche por las otras tres personas que acompañaban al fallecido en un coche hasta una gasolinera de la SE-30 a la altura del Polígono Calonge donde pararon para esperar a la ambulancia del 061, con las cuestiones previas y luego la declaración de los acusados.

En su escrito de acusación, la Fiscalía exculpó al patrón del exmilitar cubano, conocido como El Gordo, y solicitó para él 17 años de prisión por un delito de asesinato y diez meses de cárcel por un delito de tenencia ilícita de armas, así como que indemnice con 222.000 euros a la familia de la víctima. Por su parte, la acusación particular que ejerce la familia de la víctima reclama para cada uno de los acusados 30 años por un delito de asesinato, tenencia ilícita de armas y encubrimiento, así como una indemnización de 550.000 euros a la familia. La Policía Nacional detuvo inicialmente a todos los que ocupaban el coche cuando llegaron a la gasolinera con el cuerpo. Luego, tras identificar a El Cubano, tuvieron que montar un impresionante dispositivo para detenerlo. Este logró sobrevivir durante una semana en el campo. ~