El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, se desplazó en el día de ayer hasta la localidad serrana de Cazalla de la Sierra, donde mantuvo una reunión con los alcaldes de la comarca y otra con los colectivos sociales a fin de recoger la problemática de la zona. En palabras del propio Maeztu, se trata de continuar con un proyecto que comenzó al inicio de su mandato, por el cual ya ha recorrido seis comarcas de seis provincias distintas. Con estas visitas, la institución pretende acercarse a la gente de los pueblos que tiene más difícil acceso a la misma, ya que como señaló el propio Maeztu, esta institución «no tiene delegaciones», a lo que añadió que se trata de visitas que el ciudadano agradece por ser el Defensor quien «va directamente a la montaña».

Preguntado por las principales carencias de la comarca, el Defensor del Pueblo Andaluz señaló como «problema gravísimo» el de las comunicaciones, por que resulta difícil establecer un correcto equilibrio entre el medio natural y protegido y el acceso al mismo, lo que hace que tenga consecuencias que hay que tener en cuenta. Maeztu señaló a las localidades de San Nicolás del Puerto y Almadén de la Plata como grandes perjudicadas al tratarse de núcleos urbanos pequeños que quedan aislados y donde «el lugareño paga la escasez de servicios». Es por eso que pidió un mayor conocimiento y uso de la institución y que no sea vista como un órgano fiscalizador, sino como una ayuda a los problemas del ciudadano.

Igualmente, quiso destacar que no por tratarse de núcleos de población pequeños deben de emitir menos quejas, e indicó que pueden presentar en proporción las mismas que los habitantes de una ciudad.

Las quejas que presentó el público general fueron canalizadas a través de los servicios sociales, en una reunión que siguió a la mantenida con los alcaldes. Un colectivo, el de los servicios sociales de vital importancia para Maeztu, ya que, además de representar la voz de la ciudadanía, «son los que sufren las consecuencias de los ayuntamientos», señaló el Defensor del Pueblo.

Entre la problemática que expusieron los vecinos, Maeztu relató la carencia de recursos, la tardanza del salario social o la problemática de los menores. En este tema puso especial énfasis al considerarlo más complejo que el desarrollado en las ciudades por la falta de recursos.

Maeztu se refirió a los servicios sociales como «el mascarón de proa del estado de bienestar» y destacó la soledad en la que se encuentran los de la Sierra Norte sevillana. «Se ven sin muchos resultados y con problemas para explicar por qué no llegan las ayudas».

Una vez finalizadas las reuniones, el Defensor del Pueblo Andaluz dijo salir muy satisfecho y confortado y añadió que encuentros como este hacen que la institución reciba más de lo que realmente da y emplazó al ciudadano a que cuente con un servicio que «está para utilizarlo» y más, si cabe, en una comarca donde la crisis se ve de una manera más grave.

De la misma manera invitó a que la gente de los pueblos no soporte la pasividad de las administraciones y que no sufra «el castigo de no tener a nadie».

Una vez escuchados los principales problemas a los que se enfrenta la comarca, el siguiente paso será mantener una reunión en Sevilla donde se tratará la problemática más en profundidad y donde se dibujarán los cauces hacia una posible solución.Por último, Maeztu también quiso agradecer el papel de los medios de comunicación locales y regionales en su función de trasladar a la opinión pública la problemática de los ciudadanos. Según el Defensor del Pueblo, contar con medios que traten este tipo de problemas con sensibilidad es el complemento ideal a la tarea de su institución.

La visita del Defensor del Pueblo Andaluz concluirá hoy en Constantina donde recibirán a los ciudadanos en el Centro de Servicios sociales de la localidad