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El polígono El Manchón de Tomares se encuentra a pie de la SE-30 y alberga a dos centenares de firmas comerciales. / El Correo
El polígono El Manchón de Tomares sigue creciendo. El Ayuntamiento tiene previsto urbanizar suelos de titularidad municipal, por un importe cercano a los 500.000 euros –477.060,19–, para enajenarlas y para que en ellas se puedan asentar nuevas empresas.
El terreno en cuestión, ubicado en un lugar privilegiado, a pie de la SE-30, cuenta con 7.000 metros cuadrados, donde pueden tener cabida una treintena de negocios.
Actualmente, en este parque empresarial las naves industriales tipo son de 200 metros cuadrados y dos plantas de altura.
Según informan fuentes municipales, este polígono, ya comercial, tiene actualmente el cien por cien de sus parcelas ocupadas, a lo que se une que cuando se queda una nave libre, esta se ocupa de forma inmediata. Tiene una rotación muy alta, lo que demuestra que es un parque empresarial que tiene una gran demanda en el sector comercial.
El éxito actual de El Manchón se debe a que se encuentra en el cogollo del área metropolitana de Sevilla, junto a una gran vía de comunicación –la SE-30– y muy cerca del centro de la capital hispalense, a esto se une que los antiguos problemas que tenía este polígono de sufrir inundaciones cuando llovía ya han desaparecido prácticamente por completo.
De hecho, en este espacio desde el 2005 se han invertido 3,1 millones de euros, 1,3 procedentes de la Unión Europea –fondos Feder– y otros 1,8 de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) para obras de colectores que pondrán fin al problema de anegaciones que sufría este espacio y que son el complemento al tanque de tormenta que se inauguró en Tomares hace prácticamente un año, en octubre de 2015.
Este polígono, que en la actualidad cuenta con dos centenares de empresas asentadas en él, nació en 1964. Entonces se comenzaron a levantar naves sobre un suelo inundable. En esa época eran empresas relacionadas con la construcción.
Pero poco a poco fue evolucionando y estas naves, que en su gran mayoría albergaban polveros, se fueron convirtiendo en grandes tiendas de decoración, mueble y de cerámica como es Porcelanosa. De hecho, está previsto que en breve abra una nueva tienda la firma Leroy Merlin, en el espacio que hasta hace poco ocupaba la empresa de electrodomésticos Urende.
Origen industrial
Pero un inconveniente con el que se topaban estas firmas es el origen industrial que tenía este polígono, que poco o nada tiene que ver con las necesidades actuales.
Ante esta situación, según explican desde el Consistorio de Tomares, se decidió adecuar el planeamiento, porque el primer parcial estaba obsoleto al datar de 1988 y porque en 2005, cuando se revisó el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la localidad, El Manchón quedó fuera de ordenación. No fue hasta el 2014 cuando se aprobó el noveno expediente de innovación del PGOU, cuando se acordó que este polígono pasase de tener un uso industrial a uno comercial, es decir, fue en ese momento cuando la norma se adaptó a la realidad de ese espacio. Es a partir de entonces cuando se determina que las naves fuesen de 200 metros cuadrados, tuviesen dos plantas y pudiesen tener escaparate.
Todas estas mejoras son las que han permitido que este parque comercial, según el Ayuntamiento, sea tan demandado. Ante esta situación, el Consistorio ha decidido urbanizar parcelas de su propiedad, para que el próximo año se puedan asentar en El Manchón nuevas empresas. En base a las dimensiones de las naves que actualmente hay en este espacio empresarial se calcula que podrán abrirse una treintena de firmas, aunque no se descarta que todo el terreno lo pueda adquirir una sola firma comercial.