El mejor oro líquido está en el sur

La Sierra Sur copa los premios de la Diputación a los aceites provinciales consolidando su éxito

31 ene 2017 / 14:35 h - Actualizado: 31 ene 2017 / 20:32 h.
"Aceite de oliva","Diputación de Sevilla","Fernando Rodríguez Villalobos"
  • José Benítez, de Villanueva de San Juan; el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos; Eduardo Pérez, de Lora de Estepa; y Javier Ruiz, de Corcoya. / El Correo
    José Benítez, de Villanueva de San Juan; el presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos; Eduardo Pérez, de Lora de Estepa; y Javier Ruiz, de Corcoya. / El Correo
  • Momento de la lectura de la decisión del jurado. / El Correo
    Momento de la lectura de la decisión del jurado. / El Correo

Decía la célebre canción que «para hacer bien el amor hay que venir al sur». Pues lo mismo hay que hacer para catar un buen aceite, porque el mejor oro líquido de la provincia está en la Sierra Sur, al menos a juicio del jurado que ha fallado el IX premio al mejor aceite de las sierras de Sevilla y el XIX premio al mejor aceite de oliva virgen extra de la provincia que otorga cada año la Diputación. En concreto, los galardones de esta edición han ido a parar a la cooperativa San Juan Bautista de Villanueva de San Juan en el caso de las sierras, y a la cooperativa San José de Lora de Estepa por tener el mejor aceite de la provincia, que este año ha incluido un accésit para la cooperativa Nuestra Señora de la Fuensanta, de Corcoya (Badolatosa).

Pero, aunque suene a tópico, no ha sido «nada fácil» decidirse por estas tres de entre las 24 almazaras que han presentado su candidatura a un premio que ya se «consolida», según aseguró el presidente de la institución provincial, Fernando Rodríguez Villalobos, quien a pesar de que se ha criado «oliendo a alpechín en esta zona», afirmó entre risas no haber tenido nada que ver con el resultado del concurso. El objetivo del certamen, por cierto, no es otro que «ayudar a promocionar un sector que ha pasado por muchas vicisitudes», si bien las cifras de ventas no hacen más que aumentar cada año.

No en vano, Rodríguez Villalobos detalló que en el mercado nacional se ha producido un incremento de un 35 por ciento con respecto a 2015, en lo que fue «una buena campaña que recogió el testigo de la del año pasado». De la misma forma, las ventas en el mercado internacional han subido en torno a un 10 por ciento, un dato que se eleva hasta el 32 por ciento si se compara con la media de las últimas cuatro campañas. Y cómo última nota positiva, el mandatario provincial destacó que el 73 por ciento del aceite exportado entre octubre de 2015 y septiembre de 2016 es de las categorías virgen y virgen extra, «en los que indudablemente Sevilla es punta de lanza». Y no solo eso, sino que el campo está entre los sectores que más empleos genera en la provincia, a pesar de que es «muy difícil y complejo».

Una afirmación con la que están de acuerdo los premiados: «El secreto para mantener la calidad está en mucha dedicación y mucho trabajo», relata José Benítez, miembro de la junta rectora de la cooperativa San Juan Bautista, cuyo aceite se ha alzado ganador gracias a su intensidad media y a su carácter «equilibrado», tal y como expresó uno de los miembros del jurado perteneciente al Instituto de la Grasa, Fernando Fernández Román, al leer la decisión final, que tuvo lugar, obviamente, sin conocer la procedencia del aceite en cuestión.

En la misma línea se expresó el gerente de la cooperativa de Corcoya, Javier Ruiz, tras hacerse con el accésit del mejor aceite provincial, ya que en su opinión «el nombre propio que nos hemos labrado dentro de los aceites empieza con la tarea de los agricultores, que hacen el gran trabajo». En su caso, además, han conseguido envasar su producto, que el jurado tachó de «armónico y delicado» para el consumo de los propios socios de la cooperativa.

El premiado como mejor aceite de oliva virgen extra de la provincia es ya un viejo conocido en el certamen. El propio presidente de la cooperativa San José de Lora de Estepa, Eduardo Pérez Pérez, reconoció la «veteranía» de su aceite, que ha sido premiado en varias ocasiones, a tenor de su «complejidad y armonía», además de admitir que su aceituna, «desde que está pequeña, se está mimando», lo que les vale para colocarse de nuevo en el nivel más alto de un oro líquido que no para de cosechar éxitos.