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La diputada de Cohesión Territorial, Asunción Llamas, en su intervención en el pleno / El Correo
El pleno de la Diputación de Sevilla, ha aprobado por unanimidad en un pleno extraordinario las líneas, normativa y bases de la quinta edición del Plan Supera, gracias al cual la institución reconduce sus excedentes presupuestarios a actuaciones promovidas por los municipios y proyectos supramunicipales. «Condicionada» a la aprobación de los nuevos presupuestos generales del Estado (PGE), que regulan la aplicación del superávit de las administraciones, la institución activa ya «la maquinaria» de este programa de inversiones.
El proyecto presupuestario de la Diputación y sus organismos y sociedades para 2016 ascendía 416,86 millones de euros, entre los que destacaban 263,5 millones de euros destinados a gastos no financieros, es decir susceptibles de ser empleados en personal, bienes corrientes, servicios o inversiones, y no en amortizaciones de deuda e intereses. La liquidación de dicho presupuesto tras acabar 2016, según la Diputación, ha arrojado un excedente o «superávit» de más de 60 millones de euros, que la institución pretende destinar a la V edición del denominado Plan Supera, es decir, a obras promovidas por los municipios y actuaciones de carácter territorial o provincial.
Todos los grupos municipales de la institución; PSOE, PP, IU-CA, Ciudadanos y Participa, apoyaron la aprobación inicial de las bases, líneas y normativa de la quinta edición del plan Supera. No obstante, por Participa Sevilla, Julián Moreno recordó que la Diputación y los ayuntamientos están ahora «en vilo y pendientes de los PGE». Javier Millán, por Ciudadanos, dijo que «acertado el movimiento de adelantarse» a la aprobación de los PGE e ir «preparando la maquinaria» administrativa del Plan Supera.
Por IU-CA, Engracia Rivera fue más crítica, lamentando que el Gobierno provincial informase de esta decisión «a la prensa» antes que a las fuerzas de oposición, y reclamó que los 60 millones del excedente presupuestario de 2016 sean destinados íntegramente a las actuaciones promovidas por los municipios y canalizadas a través de los mismos. Desde las filas del PP, Alberto Sanromán opinó que con las modificaciones del plan, el programa «se ajusta más a la realidad de la provincia», reconociendo además la «condicionalidad» del plan al estar supeditado a la aprobación de los PGE, pero abogando por que «se ponga en marcha ya».
Finalmente, la diputada de Cohesión Territorial, Asunción Llamas, defendió que tras diferentes «correciones», las «limitaciones» actuales del plan derivan de las legislaciones y regulaciones superiores, toda vez que el presidente de la institución, el socialista Fernando Rodríguez Villalobos, defendió que los 20,43 millones de euros de esta quinta edición destinados a políticas supramunicipales responden a las «competencias» que debe afrontar la Diputación.