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Anabel Burgos, ya alcaldesa de El Viso. / Pons
El PP finalmente desoyó las voces contrarias de la dirección provincial y regional y otorgó la Alcaldía a Anabel Burgos, posibilitando la vuelta de IU al poder en El Viso del Alcor dos décadas después. Después de que anoche quedara paralizado el acuerdo de gobierno que estaba ya prácticamente firmado, los populares, con Fernando Rueda a la cabeza, decidieron votar a favor de la candidatura de IU. La suma de ambos grupos (cinco de IU y cuatro PP) imposibilitaba la reelección del socialista Manuel García Benítez, que se quedó a apenas 500 votos de la mayoría absoluta. Además, no sólo se queda en apoyo en esta sesión, ya que ambas formaciones, PP e IU, conformarán un gobierno de coalición en el que el reparto de áreas se determinará a partir del próximo lunes.
En un pleno que no fue crispado pero que fue interrumpido por numerosos aplausos -sobre todo, en el momento que los cuatro ediles populares levantaron los brazos para apoyar a Anabel Burgos-, se escenificó el crudo enfrentamiento entre PSOE y el PP, agravado por los últimos acontecimientos y denuncias de pactos antinatura. El primero que intervino fue el propio Rueda, que indicó que «el paso dado» por su formación «ha sido arriesgado», pero que eran «necesario para cambiar el devenir de El Viso», para, a continuación, cargar contra el anterior gobierno socialista, acusándole de practicar «el ordeno y mando y la prepotencia». «El PP no está en política para ser cobardes», afirmó en un discurso en el que denunció -no sólo a sus rivales, sino a su propio partido- de que se haya utilizado El Viso dentro de «un cambio de cromos y para amarrar pactos».
No lo pensó así, el alcalde saliente, Manuel García Benítez, que tras agradecer «el apoyo mayoritario de los vecinos de El Viso» y defender sus 12 años en el Consistorio. Acusó a PP e IU de firmar «un pacto de perdedores» y lanzó un órdago a Rueda: «Ya tiene mi cabeza, ya lo ha conseguido su objetivo, ahora se puede ir a su casa», afirmó, indicando que la decisión de los populares se ha movido por «el rencor y odio personal». Mientras, a IU le reprochó que vendiera en campaña que no pactaría ni con socialistas ni con populares.
Por último, intervino la alcaldesa -que ya intervino antes, saltándose los pasos protocolarios, para agradecer el apoyo «de sus compañeros y del PP». En su primer discurso en la Alcaldía, Burgos recurrió a una frase de Bertol Brecht para defender el pacto con el PP. «No acepten lo habitual como cosa natural pues en tiempos de desorden sangriento, de confusion organizada, de arbitrariedad conciente, de humanidad deshumanizada, nada debe parecer imposible de cambiar», inició su discurso, que sirvió para desgranar el programa de la coalición de izquierdas, que iban desde los presupuestos participativos y la mejora de la cultura y el deporte hasta el desarrollo de los polígonos y la apuesta por la economía social, entre otras líneas básicas de su mandato que hoy arranca.