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José María Martín deposita su voto secreto ante la mirada del ya exalcalde Santiago Jiménez, de La Voz de Villaverde. / F. J. D.
El pleno del Ayuntamiento de Villaverde del Río se ha reunido de forma extraordinaria para elegir, dos meses después de su constitución, al segundo alcalde de la presente legislatura. Tras la sesión resultó elegido el socialista José María Martín, con el único apoyo de su partido. El hasta hoy alcalde en funciones, Santiago Jiménez, de La Voz de Villaverde, no superó la cuestión de confianza a la que se sometió el pasado 6 de agosto, por lo que fue cesado de su cargo. Este es el primer cambio de gobierno en la provincia de Sevilla tras las elecciones municipales de mayo.
El pleno comenzó a las 12 del mediodía con un lleno absoluto. La secretaria del Ayuntamiento dio inicio a la sesión dando lectura al articulado de la ley electoral correspondiente a la cuestión de confianza y la posterior elección de nuevo alcalde. El único candidato postulado a nuevo alcalde fue Martín. El PP no presentó y los concejales de La Voz de Villaverde, en la misma mañana del pleno, dieron registro de entrada a su renuncia por escrito a ser cabecera de lista, como reseñó la funcionaria municipal.
Aunque la votación fue secreta, los concejales socialistas mostraron abiertamente sus papeletas antes de introducirlas en la urna, en las que escribieron el nombre de su candidato. Del recuento posterior se pudo concluir que solo los cinco ediles socialistas votaron a Martín, contabilizándose cinco votos en blanco y tres abstenciones. Al no tener ningún candidato mayoría, se proclamó alcalde el candidato de la lista más votada, como marca la normativa. José María Martín prometió su cargo –por un lapsus como concejal, que de inmediato rectificó–. Sin tomar posesión de la presidencia del pleno, desde su bancada de la oposición dio el turno de palabra a los portavoces de los otros dos partidos antes de ofrecer su discurso de investidura.
El ya exalcalde, Santiago Jiménez, apuntó que «por tercera vez un candidato socialista es investido alcalde sin ganar las elecciones», criticándoles que «han preferido mantener sus compromisos con el Partido Popular antes que apoyar un gobierno elegido por el pueblo». Añadió que «seguirán siendo concejales» y se ofrecen al pueblo para llevar al pleno «las reivindicaciones y derechos que se defienden en la calle».
La portavoz del PP, Magdalena de los Santos, recalcó que «no ha habido pacto y tenemos cuatro años para demostrarlo», además de explicar que tras la renuncia de Jiménez, lo «normal y ético» es no presentar candidato y que gobierne la siguiente lista más votada. Definió además a Jiménez como «cobarde» por «no saberse los intereses por los que se va».
Finalmente, el nuevo alcalde no quiso entrar en los «rumores de pacto, que se han encargado de divulgar y no aportan nada a este pueblo». Habló de la «emoción» y «enorme responsabilidad» al ser investido. Aunque señaló que «no es la forma en la que me imaginaba llegar a la alcaldía» si dijo sentirse «en la obligación y responsabilidad de asumir funciones» en una situación «no provocada por este grupo de concejales». Desglosó algunas cuestiones de su programa de gobierno, como el bienestar social y el desarrollo del pueblo y como líneas de su gestión resaltó transparencia, participación ciudadana y cercanía, además de tender vías para el diálogo y el consenso con el resto de fuerzas, buscando la «unidad por el bien común, por encima de los intereses partidistas», así como abrir la puerta a las fuerzas que no consiguieron representación «con la creación de un simbólico concejal número 14».