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Los escolares albaidejos ya han podido comprobar de primera mano cómo es una excavación arqueológica. / El Correo -
Las rutas por el entorno también son una actividad muy demandada. / El Correo
La riqueza arqueológica que atesora Albaida del Aljarafe es innegable, aunque a juicio de Emilio Infante, miembro de la cooperativa Turismo Albaida Sociocultural, «no está todo lo puesta en valor que debería». Por eso, junto a otros tres amigos especialistas en diferentes parcelas, se ha puesto manos a la obra para difundir y promover el turismo en la localidad y la comarca del Aljarafe, con varias iniciativas a través de las cuales se aúna la arqueología, la historia o la naturaleza.
La última de ellas, prevista para el fin de semana del 17 y 18 de octubre pero que finalmente tuvo que ser suspendida y aplazada por las inclemencias meteorológicas, es la actividad Arqueología en familia, que viene a ser una continuidad de la labor que la cooperativa lleva a cabo con los escolares de la localidad. En concreto, según explica Infante, se trata de un «simulacro de excavación», y consiste, básicamente, en que aquellos que se apunten se dividan en grupos –en este caso, padres con sus hijos–y, provistos de las herramientas adecuadas para tratar el terreno, puedan encontrar «tesoros» que esconden los organizadores del evento, como «monedas antiguas, restos de cerámica...», todo ello correctamente documentado por uno de los integrantes de Turismo Albaida Sociocultural, que precisamente es arqueólogo. Además, para incentivar aún más la participación, la iniciativa se acompaña de un desayuno andaluz compuesto por «pan con aceite y azúcar y café o colacao», que permitan coger fuerzas antes de adentrarse del todo en la tierra. Pero esta actividad no es más que una ampliación de las que la cooperativa viene realizando en el pueblo desde hace tiempo.
Así, entre otras, las rutas nocturnas para adultos «han tenido mucho éxito, y luego pensamos en los niños, porque no teníamos nada especialmente adaptado para ellos». Por eso, Turismo Albaida Sociocultural promovió visitas a las ladrilleras de la época medieval que se asientan en el municipio, «que han tenido uso hasta hace apenas 20 años». De esta forma, los más pequeños pudieron conocer de primera mano cómo vivió «la última familia ladrillera, permitiendo al mismo tiempo que conocieran un poco más de su localidad». Además de eso, los escolares visitaban la zona de la Barranca, que cuenta con «una fuente salobrera, y luego ellos mismos podían hacer sus propios ladrillos».
Todo ello está dirigido a los primeros cursos de Educación Primaria de los colegios de Albaida. «Más tarde lo fuimos ampliando y, en el campamento municipal, llegamos a introducir una ruta a la parcela privada de uno de nuestros compañeros», apunta Infante, que posee una cueva natural «que tiene rasgos de haber sido manipulada por el hombre en la antigüedad», así como restos de molinos árabes o fuentes romanas. Y fue precisamente para dar a conocer esos vestigios del pasado que aún hoy en día se conservan en Albaida el motivo por el que surgieron estas rutas organizadas por la cooperativa en la que se integra Emilio Infante.
La «espinita clavada» es que Arqueología en familia tuviera que ser suspendida por el mal tiempo, pero en breve volverá a ser convocada, previsiblemente, para el fin de semana del 7 y 8 de noviembre. Los interesados pueden hacer su inscripción en el 674920625 o en scturismoalbaidasc@gmail.com.