La carrera oficial no transitará por la ‘catedral de la Sierra Sur’

Las obras en la iglesia de San Miguel revolucionan la Semana Santa de Morón. El colegio La Inmaculada, a escasos metros, acoge la estación de penitencia

María Montiel marmondua /
10 mar 2018 / 22:19 h - Actualizado: 10 mar 2018 / 22:52 h.
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  • La hermandad de la Santa Cruz procesiona por la calle San Miguel. / M.M.
    La hermandad de la Santa Cruz procesiona por la calle San Miguel. / M.M.

La restauración de la conocida como la pequeña catedral de la Sierra Sur revolucionará el recorrido de la Semana Santa de Morón de la Frontera. La carrera oficial moronense se verá modificada debido a las obras en ejecución de la Iglesia de San Miguel. De esta manera, el colegio la Inmaculada, situado en la calle San Miguel a escasos metros de este templo, acogerá la estación de penitencia en la capilla interior del mismo.

Desde el Domingo de Ramos y hasta el Sábado Santo, las nueve hermandades que procesionan por la ciudad comenzarán la carrera oficial en la plazoleta Meneses pasando por San Miguel, aunque sin entrar dentro de la iglesia. A escasos metros se encuentra este colegio que ha ofrecido sus instalaciones ante la imposibilidad de poder realizar estación de penitencia en San Miguel, que sigue en unas obras de rehabilitación que arrancaron hace unos seis meses.

En concreto, todas las hermandades moronenses realizarán la subida por la calle San Miguel y bajarán por las Morenas, excepto San Francisco, cuyo recorrido realiza el trayecto entrando en las Morenas para luego pasar por San Miguel.

Aunque la iglesia no está cerrada al culto, el coro está clausurado y, «por tanto se queda muy estrecho para la entrada y salida de la estación de penitencia», explican desde el Consejo local de Hermandades. No obstante, las tres cofradías que hacen su salida desde San Miguel mantendrán su salida y entrada desde la imponente catedral de la Sierra Sur.

Obras de rehabilitación

Las obras dieron comienzo en noviembre, centradas en el subsuelo, cubiertas y bóvedas de la nave principal, así como en la capilla de los Dolores. También se concluirán las canalizaciones subterráneas realizadas en la cabecera para alojar las instalaciones de iluminación, megafonía y seguridad del templo. Las actuaciones tienen un presupuesto de 400.000 euros, de los cuales 60.000 serán aportados por la parroquia y el resto por la Archidiócesis de Sevilla.

La iglesia fue erigida entre 1506 y 1730 sobre las ruinas de un templo medieval. Está construida en tres naves de piedra caliza y consta de elevadas bóvedas sostenidas por columnas. Abarca diversos estilos que incluyen desde el Gótico al Barroco tardío. Fueron once los arquitectos que intervinieron en su ejecución, entre ellos Lorenzo de Oviedo o Diego de Riaño.