El presidente de la Diputación de Sevilla y de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), Fernando Rodríguez Villalobos (PSOE), aseguró este martes que la institución provincial acabará el ejercicio 2017 reduciendo a «cero» su deuda viva, es decir, su deuda con las entidades financieras.
«En la Diputación de Sevilla cumplimos rigurosamente con todas las reglas fiscales; con la regla de gasto, liquidando nuestros presupuestos sin sobrepasar el límite del gasto no financiero, también con los períodos de pago a proveedores y con la estabilidad, pues contamos con capacidad de financiación incluso para cuantías importantes», defendió Rodríguez Villalobos.
Al respecto, insistió en que la institución es cumplidora «también en los límites de deuda viva, que hemos reducido en cerca de 54 puntos porcentuales, lo que significa bajar nuestra deuda con los bancos en más de 144 millones de euros; desde los 210 millones que teníamos en 2012, a los 68 millones estimados de 2016 a falta de completar la liquidación» del ejercicio presupuestario de tal año.
En este sentido, aseguró que «de seguir así, acabaremos 2017 con cero euros de deuda viva, con una gran experiencia en la generación de ahorro, pero con nuestra capacidad de gasto legalmente coartada».
Para el presidente de la Diputación de Sevilla, es «indispensable que el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas dé una respuesta rápida al destino del superávit para este año, unas cantidades que deben servir para equilibrar los límites en el gasto no financiero que impone la Ley, permitiendo inversiones que mejoren las infraestructuras municipales».
La Corporación Provincial de Sevilla reunida en sesión plenaria verá la próxima semana, entre otros asuntos, todas las cifras de la liquidación presupuestaria correspondiente al pasado ejercicio de 2016.
Rodríguez Villalobos el año pasado avanzó que la deuda viva de las diputaciones andaluzas, correspondientes al cierre de 2015, publicados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, era de 729,449 millones de euros, frente a los 888,145 millones que tenían en ese mismo casillero al cierre del ejercicio de 2014. Lo que en su opinión significa que las corporaciones provinciales andaluzas siguen haciendo con rigor su trabajo y, eso, tiene como fruto un descenso de la deuda viva de un 21,75 por ciento.