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La Policía Local impide el paso en el lugar del crimen. / Jesús Barrera
El hombre detenido como responsable de acabar con la vida de Ana María Morales, la mujer de 50 años que fue localizada el domingo muerta en un olivar de Pilas, ha ingresado en prisión preventiva. Así, lo ha decidido la jueza del Juzgado de Instrucción número 1 de Sanlucar la Mayor, encargada de la investigación del crimen, después de que la Guardia Civil pusiera a disposición judicial a Enrique R.R., de 34 años, que se ha acogido a su derecho a no declarar.
Según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la magistrada ha acordado prisión provisional -comunicada y sin fianza- por un delito de homicidio. La magistrada ha levantado el secreto de sumario que pesaba sobre este caso y ahora continúa con la instrucción, centrada en el análisis de distintas pruebas, los resultados de la autopsia de la fallecida y los datos que puedan proporcionar distintos testigos de los hechos que se encontraban en el entorno en el momento del suceso. Hasta ahora, las pesquisas realizadas por la Benemérita no indican que se produjera una agresión sexual.
Enrique R.R. fue detenido por la Guardia Civil poco después de que él mismo alertase de que había localizado un cadáver en un olivar cercano a Pilas. El presunto autor presentaba heridas que, según dijo en ese momento, fueron provocadas por dos hombres que habrían dejado el cadáver en el lugar donde él lo localizó. Sin embargo, los agentes desmontaron su versión, tras lo que fue detenido. Por el momento, y según indicaron fuentes judiciales, no se han encontrado indicios de una posible agresión sexual como objeto del crimen y tampoco existe relación sentimental entre la víctima y el agresor.