No se puede poner puertas al campo, ni a los insectos que por él pululan, así que es normal que el sector agrícola esté preocupado por la Xylella fastidiosa. Por eso la Junta se ha apresurado a garantizar que habrá fondos para indemnizar, si llega el caso, a los posibles afectados por esta bacteria que puede producir graves daños en cultivos de gran importancia económica en Andalucía como el olivo, los cítricos, la vid y los frutales de hueso. Eso sí, la Junta pide al Gobierno central que unifique los criterios para calcular dichas ayudas, aún no cuantificadas.
«La Ley contempla estas indemnizaciones», defendió en declaraciones a este periódico Rafael Olvera, director general de la Producción Agrícola y Ganadera de la Junta de Andalucía.
En su opinión, la Ley de Sanidad Vegetal establece indemnizaciones «cuando haya que tomar medidas como la destrucción del cultivo» pero la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural quiere «que haya una norma nacional que unifique criterios». «Al igual que lo hace el Real Decreto que fija las cantidades exactas que se deben pagar cuando una vaca se tiene que sacrificar por tuberculosis», puso como botón de muestra.
Olvera, que recordó que la Comunidad Valenciana ya aprobó sus indemnizaciones, explicó que la Junta no hará lo mismo hasta que no se detecte la plaga en Andalucía, «y ojalá no llegue nunca», y que la partida presupuestaria tendría que salir ya de las cuentas de 2018. El director general de la Producción Agrícola y Ganadera no quiso aventurar cuánto dinero tendría que destinarse. «Fondos habrá, lo garantiza la ley», remarcó tras insistir en que el Estado debe unificar los criterios de estas indemnizaciones, «que deben establecerse en base a los precios medios del mercado de cada localidad o comarca», apuntó Olvera.
Desde sede parlamentaria, el consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ratificó el pasado jueves que la lucha contra la Xylella fastidiosa «es una prioridad absoluta» para el departamento que dirige, por lo que se han extremado las medidas de vigilancia y prevención en las que se trabaja desde 2014 en el marco de la Estrategia Andaluza contra esta enfermedad. Según sostuvo, se ha intensificado el control en explotaciones agrícolas y en el medio natural en el norte de las provincias de Jaén, Granada y Almería, las zonas más próximas al foco registrado en Alicante.
El titular de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta dejó claro que están «revisando el protocolo y el procedimiento de actuación ante una hipotética aparición de la enfermedad en Andalucía», afirmación a la que añadió un mensaje de tranquilidad.
Por su parte, el responsable de Olivar de Coag Andalucía, Juan Luis Ávila, aseguró que «la administración debe dar a conocer con la mayor brevedad posible la indemnización que recibirían los agricultores en caso de aparición en sus explotaciones», de forma que el agricultor no tenga esa incertidumbre si se viera afectado.
Además, Ávila apuntó que «algo debe estar fallando en el protocolo de erradicación de la Xylella, ya que estamos viendo que no para de propagarse y que ha conseguido entrar ya en la península ibérica». Por ello, demandó que se revise dicho protocolo, para conocer los fallos y poder activar nuevas medidas que pongan freno a su expansión. «Creo que sería muy interesante conocer las estrategias que se han desarrollado en aquellos países que llevan años con la enfermedad y que conviven con ella, sin que haya habido que lamentar daños cuantiosos», incidió.
Por ello mismo, el responsable de olivar de COAG Andalucía consideró que hay que actuar «con sensatez y actuar rápida y eficazmente», pero alertó de que «no debemos crear una alarma innecesaria entre los agricultores», mensaje en el que coincidió con el consejero. «Lo que tenemos que hacer –dijo Ávila– es perfeccionar las herramientas para frenarla y saber plantarle cara, pero ello sin caer en extremismos que no nos conducirán a nada».
La Junta activó el teléfono 955 059 898 y el email info.xylella@juntadeandalucia.es para su detección precoz.