La protesta de comerciantes organizada ayer por la asociación Alacipa ante el Ayuntamiento palaciego, con cuyo alcalde, Juan Manuel Valle (IU), se terminaron reuniendo los integrantes de una comisión liderada por Felipe Cardo, ha dado su fruto: desde ayer, la Policía Local saca a la calle dos parejas de agentes de día y otras dos de madrugada, el doble que antes; mientras que la Guardia Civil, que hasta ahora contaba con una sola pareja por turno en tareas de vigilancia del pueblo, dispondrá ya de dos parejas por turno y, circunstancialmente, hasta de tres. Por eso, el medio centenar de comerciantes que se presentaron a las nueve de la mañana en la puerta del Consistorio –algunos con pancartas en las que reivindicaban mayor seguridad– salió satisfecho de la reunión. «El colectivo se ha movido con fuerza y se ha notado», decía Cardo, cuando en la sede de la asociación Alacipa volvieron a reunirse en asamblea para ofrecerles a todos las novedades ofrecidas por el alcalde y los jefes de la Policía Local y la Guardia Civil, que también estuvieron en la reunión. Desde anoche, no solo ha aumentado significativamente el número de agentes en la calle, sino su distribución estratégica por la localidad.
En cualquier caso, los comerciantes, que siguen reuniendo firmas vecinales para enviar a la Subdelegación del Gobierno en Sevilla, pidieron al regidor que en próximas reuniones de la comisión conformada también con los cuerpos de seguridad del municipio se ofrezcan datos del número de agentes con que se cuenta. Valle aseguró ayer que, con respecto al año pasado, la plantilla policial ha crecido en cinco agentes, «pues muchos estaban en comisión de servicio y los hemos ido recuperando». Ahora hay 30 policías, a los que se suma el medio centenar de guardias civiles.
La reunión de ayer, al margen de calmar los ánimos de los comerciantes con el aumento policial, sirvió también para iniciar los trámites legales y administrativos para colocar cámaras de videovigilancia, sobre todo en el centro, y para fijar charlas formativas dirigidas a los propios comerciantes en torno a la seguridad de sus establecimientos.
El alcalde terminó coincidiendo ayer con las declaraciones del subdelegado del gobierno en Sevilla, Ricardo Gil Toresano, quien incidió el día anterior en que precisamente Los Palacios no destacaba a nivel provincial por la inseguridad, «como sí ocurre en otros pueblos de la comarca», señaló Valle, quien ratificó el dato de que el número de delitos en el pueblo, desde 2014, no ha hecho sino descender, «aunque ahora haya un repunte, como pasa todos los años en estas fechas, y la población tenga las sensación de que hay muchos robos».