La plaza de Santa Cruz de Écija tendrá nueva piel en Semana Santa

La inversión de la obra asciende a aproximadamente 330.000 euros con cargo a los planes Pfoea (antiguo PER). Los trabajos dejarán la plaza a cota cero

20 sep 2017 / 21:29 h - Actualizado: 21 sep 2017 / 00:23 h.
"Urbanismo"
  • Plaza de Santa Cruz de Écija, que se está remodelando. /M.R.
    Plaza de Santa Cruz de Écija, que se está remodelando. /M.R.

Una de las plazas más emblemáticas y visitadas del casco histórico de Écija, la de Nuestra Señora del Valle, conocida popularmente como Santa Cruz, estrenará nuevo aspecto dentro de seis meses, coincidiendo con la Semana Santa de 2018. A través del Plan de Fomento del Empleo Agrario (Pfoea), antiguo PER, se van a invertir alrededor de 330.000 euros en cambiar la fisonomía de este espacio.

La intención del equipo de gobierno local es cambiar el dibujo de chinos del pavimento de Santa Cruz, dejar la plaza a cota cero y modificar igualmente las canalizaciones subterráneas de la explanada, presidida por la monumental parroquia mayor de Santa Cruz, igualmente uno de los atractivos turísticos del municipio de Écija.

Afirma el Gobierno local (PSOE), que la estética de la plaza de Santa Cruz no se verá alterada, ya que el plan especial para el casco histórico, el Pepriccha, protege cualquier tipo de modificación sustancial en la estética de la zona. Las obras ya han comenzado con el movimiento de tierras en el interior de la plaza, y se irán trasladando a la conexión con las calles Zayas, Sancha Carrillo y José Canalejas, las principales vías que desembocan en esta plazuela.

«Tratamos de eliminar las barreras arquitectónicas, reordenar los accesos desde las distintas calles y dotar a la plaza de una ergonomía que facilite la visibilización de monumentos como la iglesia de Santa Cruz y una comodidad de estancia», señala el concejal de Gestión del Espacio Urbano, Sergio Gómez, que añade que «vamos a eliminar aparcamientos de la plaza, dejando solo para casos muy concretos».

El concejal asegura que, además, se va a reestructurar la recogida de aguas y el saneamiento en la plaza, que «va a quedar expedita de vehículos, en plataforma única, se va a dotar de fuentes de agua públicas, se va a reubicar la vegetación que ahora es una barrera entre la iglesia y la plaza, que tendrá tres pequeñas estancias dentro».

Una vez remodelada, la de Nuestra Señora del Valle va a ser una plaza en plataforma única, con fuentes públicas de agua y el mobiliario urbano y la vegetación actual reordenados para que no supongan una barrera arquitectónica. «Se va a ganar acera en la plaza y va a quedar delimitada una zona para vehículos», afirma Gómez.

Al mismo tiempo que se colocan canalizaciones subterráneas y se eliminan obstáculos en la plaza, se tiene previsto reubicar los bancos y las farolas. Pero la simbólica cruz central de la plaza no se tocará. La remodelación de la emblemática plaza supondrá nivelar calzada y explanada, suprimiendo barreras, algo que cobrará un nuevo significado en la Semana Santa ecijana, en la que la plaza y la iglesia de Santa Cruz tienen un claro protagonismo.

«Va a ser un proyecto que cuando la gente lo vea finalizado va a gustar y va a quedar dispuesto para que cuando se produzca la integración de Santa Cruz en la carrera oficial, los pasos van a tener un itinerario continuo desde la iglesia hasta el centro de la plaza», explica Sergio Gómez, «podrán salir directamente y no tener la barrera que ahora constituyen escalones, vegetación y bancos públicos».

Además, el edil de Gestión del Espacio Urbano señala que, al quedar Santa Cruz a cota cero, «se va a jugar con colores de manera que el itinerario de los coches por la plaza va a seguir siendo el mismo, pero va a tener un efecto visual, se va a ganar acera en la plaza y va a quedar delimitada una zona para vehículos».

La reubicación de elementos y supresión de otros obedece a que «chocan con la disposición que buscamos de dar visibilidad y ergonomía a la plaza», argumenta Gómez, «y se recolocan para que queden en el centro de las estancias laterales» que tendrá la futura plaza.

El concejal se adelanta a las críticas que ya están surgiendo acerca de llevar a cabo unas obras de este calado en un rincón tan representativo del municipio astigitano. «Tenemos que tener claro hacia dónde queremos ir, hacia una ciudad amable», enfatiza, «con eliminación de barreras arquitectónicas, cómoda, una ciudad en la que se pueda discurrir con comodidad, tenemos que tener acerados amplios que fomenten la garantía de pasear por la ciudad», explica.

Reconoce el responsable municipal de Urbanismo que «es cierto que tenemos que ir habilitando bolsas de aparcamientos, pero también hay zonas que deben ganarse para el peatón». El edil apunta que son habituales las obras para dejar plazas y calles a cota cero –la propia calle Santa Cruz, que desemboca en la plaza ya lo es desde hace años– y que «no vamos a hacer nada que no se haga en otras ciudades».

«Tenemos que buscar una ciudad cómoda, transitable, que la gente que venga a visitarnos se sienta cómoda y todas las personas con movilidad reducida no tengan dificultades para transitarla», apunta.