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Un perro adiestrado inspecciona la olla abandonada en el supermercado moronense. / moroninformacion.es -
Un vehículo policial a distancia manipula la olla abandonada. / moroninformacion.es
Una simple olla de cocina abandonada en un centro comercial ha desatado el miedo en Morón de la Frontera. Una ciudad que también se encuentra en estado de preocupación debido al aumento del tráfico aéreo por el cielo de la localidad. Dos hechos aislados que, tras los atentados de París, han sumido en una psicosis a los vecinos de Morón. Y es que, desde el lunes, las redes sociales son un hervidero de rumores por el aumento del tráfico aéreo, unido a la baja altura de los aviones, sobrevolando la ciudad. El temor era patente en los vecinos que preocupados especulaban con la posibilidad de que las maniobras estuvieran motivadas por los sucesos del fin de semana.
El desconocimiento de las actuaciones que se llevan a cabo en la instalación militar generan a los moronenses un miedo y un estado continuo de nerviosismo que, en esta ocasión, se han acallado con un comunicado, por parte del Ejército del aire, confirmando que esta situación excepcional era debida al ejercicio Nube Gris 2015, que se ha desarrollado en la zona hasta el viernes.
La finalidad del ejercicio era comprobar tácticas y técnicas relacionadas con la guerra electrónica, además de adiestrar a las tripulaciones en sistemas de autoprotección en un escenario táctico realista. Para ello, era necesario realizar vuelos de rasante, algo que ha sido corroborado por los vecinos de toda la comarca por el fuerte ruido de los mismos.
El hecho de tener una instalación militar a pocos kilómetros del núcleo urbano aumenta el temor de unos vecinos que, este viernes al mediodía, volvían a estar en estado de emergencia por una olla abandonada en un bolardo de una gran superficie.
Rozaba el mediodía y un vecino alertaba a la Policía sobre una cacerola abandonada a las puertas del supermercado Eroski de la avenida de la Asunción. Ante esto, los agentes de la Policía Nacional de Morón junto con la Policía Local, ponían en marcha el protocolo establecido para estas situaciones, desalojando primero el supermercado y fijando un cordón de seguridad, que incluso ha impedido el tránsito de vehículos que venían desde la carretera de Arahal.
Tras asegurar el perímetro, se esperó a los artificieros de la Policía Nacional para conocer el contenido de la olla. En un principio, varios perros adiestrados inspeccionaron el objeto que fue abierto por un robot teledirigido. Finalmente se comprobó que estaba vacía. Una falsa alarma que generó inquietud entre los moronenses.
El alcalde, Juan Manuel Rodríguez (PSOE), que acudió al lugar, comprendió esta intranquilidad ya que «no es habitual que se abandone estos objetos». En cambio aclaró que la actuación «es la que marca el protocolo de seguridad», debido a que España está en el nivel 4 de Alerta.