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Un trabajador del servicio de limpieza de Tomares baldea una calle de la localidad. / El Correo -
Una barredora de Alcalá de Guadaíra. / El Correo
Tomares, Utrera y Alcalá de Guadaíra son los tres municipios más limpios de la provincia de Sevilla. Son los únicos de los 104, sin contar con Sevilla capital, a los que la Asociación Técnica para la Gestión de Residuos y Medio Ambiente (Ategrus) ha concedido escobas de plata y oro por el buen servicio que prestan en materia de limpieza y por elaborar y desarrollar tecnologías que permiten realizar una gestión sostenible del medio ambiente.
El que más reconocimientos acumula es Tomares. Ha obtenido dos medallas de oro –2014 y 2016– y una de plata en 2010. Solo la capital hispalense le gana –ha sido galardonada con cinco escobas de platino (2004, 2006, 2008, 2010 y 2014), una escoba de oro (1998), dos escobas de plata (1992 y 1996), y una mención especial (2002)–.
Ahora la meta del Ayuntamiento de Tomares, con su alcalde al frente, José Luis Sanz (PP), es lograr la excelencia. Busca obtener una escoba de platino y para conseguirlo no ha parado de trabajar.
La escoba de plata la ganó Tomares por ser el primer municipio andaluz en implantar el servicio de intervención rápida de emergencia –acude a las llamadas de los vecinos que denuncian suciedad en un punto– y por ampliar el barrido mecánico. La primera escoba de oro la obtuvo por aumentar la plantilla del servicio. Pasó de tener 39 operarios a contar con 45, trabajando los 365 días del año. Además, amplió las zonas de barrido, pasando de siete sectores a 13. La última escoba de oro, la del año pasado, la ha logrado por renovar el 95 por ciento de su flota de vehículos y el 100 por cien de la maquinaria del servicios de Parques y Jardines, de los cuales la mayoría son ecológicos y eléctricos. La concejal de Parques y Jardines, Limpieza, Residuos Sólidos Urbanos, Cristina María Jiménez, recalca que con estas mejoras se cuida el medio ambiente y se reduce la contaminación acústica.
Jiménez remarca que su objetivo es seguir mejorando y para ello pide también la colaboración de los vecinos. Uno de los puntos negros son los excrementos de los perros que no recogen los propietarios de las mascotas. Señala que desde el Ayuntamiento de Tomares se realizan numerosas campañas de concienciación, pero se lamenta de que hay vecinos incívicos que hacen caso omiso a las peticiones municipales. La edil admite que este problema afecta a la mayoría de las localidades, pero asegura que ella y el equipo de gobierno al que pertenece no van a dejar de trabajar para que los ciudadanos se conciencien. De hecho, señala que se va a modificar la ordenanza de medio ambiente, donde se tocará el punto de los excrementos y del pipí que hacen los perros en farolas y esquinas, que para su limpieza se requiere el servicio de un camión de baldeo.
Por su parte, Utrera obtuvo su escoba de plata en 2008, siendo alcalde el andalucista Francisco Jiménez. En este caso fue por las mejoras realizadas en materia de limpieza. Ahora, el gobierno socialista quiere obtener nuevas menciones y para ello, según el concejal de Agricultura y Servicios Operativos, Vicente Llorca, el presupuesto para este servicio entre 2017 y 2018 se incrementará considerablemente. Llorca quiere obtener una escoba de platino, aunque admite que será difícil porque en la actualidad hay mucha «competencia», ya que todos los ayuntamientos apuestan por la limpieza. Esta situación, sin embargo, no le desanima. Explica que Utrera destina unos cuatro millones para el servicio «y se llegarán a presupuestar cerca de cinco millones en 2018». Este incremento servirá para modernizar la maquinaria, que sea menos ruidosa y contaminante, y en ampliar la plantilla. Llorca advierte de que su municipio cuenta con un hándicap porque tiene tres pedanías: Guadalema de los Quintero, Trajano y Pinzón, a las que también se les presta servicio.
Al igual que la edil de Tomares, el concejal de Utrera indica que es imprescindible la colaboración ciudadana para que los esfuerzos municipales en el servicio de limpieza tengan la máxima eficacia.
Por último, Alcalá de Guadaíra también obtuvo escoba de plata. En este caso fue en 2010. Fue uno de los tres municipios de más de 50.000 habitantes que en esa ocasión fueron reconocidos por sus esfuerzos por mantener la ciudad limpia. Desde esta fecha, según su concejal de Limpieza, José Antonio Montero, no se ha bajado la guardia. El Consistorio limpia a diario más de 12.000 metros cuadrados de zonas verdes y espacios comunes como plazas, paseos y calles con jardines. Actualmente de la limpieza viaria se encargan más de 40 personas, que cubren «1.001 calles del casco urbano», según el edil, que añade que el servicio de recogida de basura cuenta con un equipo de 30 personas que desempeñan su trabajo en Alcalá de Guadaíra y Mairena del Alcor, ya que la Mancomunidad de Los Alcores es la que presta el servicio de limpieza viaria y recogida de basura en el municipio alcalareño.