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El silo de Morón de la Frontera se sitúa a las afueras del municipio, justo en la carretera rumbo a Arahal. / M.M.
Un antiguo silo de trigo como centro de acogida de animales domésticos abandonados. Ésta es la utilidad que el Ayuntamiento de Morón de la Frontera quiere dar a una parcela que la Junta de Andalucía cedía en 2009 por un plazo de 50 años al Consistorio moronenses para la construcción del parque de bomberos. No obstante, hace un año el pleno del Consistorio aprobó destinar y ceder a Diputación de Sevilla una parcela situada en el polígono Juan Macho para albergar este servicio de extinción de incendios que actualmente se sitúa cerca del cementerio municipal.
Sin utilidad tras la nueva ubicación escogida para el parque de bomberos, el Ayuntamiento moronense quiere destinar la parcela del antiguo almacén de trigo a la creación de un centro para acogida de animales domésticos abandonados, estancias vacacionales, gestión, difusión y concienciación de la naturaleza y vida animal, con el fin de mejorar su vida en el municipio y defender sus derechos.
Era en pleno ordinario de que se celebró en este pasado mes de febrero cuando el Consistorio solicitó este cambio de uso para la parcela que será «de gran importancia para la localidad, lo que indudablemente, desde el punto de vista social, supondría un beneficio para la población».
Un lugar que aliviaría la precaria situación de las dos asociaciones que se dedican a la protección de los animales, principalmente perros, en Morón de la Frontera.
El alcalde, Juan Manuel Rodríguez (PSOE), señaló que desde su llegada a la Alcaldía, «nos encontramos con la situación precaria que tenemos a la hora de atender la recogida de animales, sobre todo, de perros» y la utilización del espacio del antiguo silo sería muy beneficioso para dar una solución a este problema.
El antiguo almacén de trigo está situado a la salida del municipio por la carretera de Arahal en una parcela de unos 3.000 metros cuadrados catalogados como terreno rústico, a escasa distancia de la población, bien comunicado por carretera y de fácil acceso peatonal.
La zona reúne las condiciones necesarias para compatibilizar el cumplimiento de la ley en materia de gestión de animales abandonados como las necesarias actividades educativas complementarias. El regidor manifestó que la solicitud a la Junta de Andalucía del cambio de uso es «un primer paso» y que «hay que ser prudentes».
Manifestó que entiende que «no tiene que haber problemas, porque son competencias municipales, están recogidas en la ley, y lo hemos justificado. Creo que en breve vendrá resuelto que se nos permite, y una vez que se nos dé el visto bueno empezaríamos la segunda etapa, que no es fácil, que es la de buscar dinero para poder hacer la rehabilitación de aquel espacio para ese fin», puntualizó Rodríguez.