Movilización vecinal en Guillena para pedir la dimisión del alcalde

Se reclama iagualmente la devolución del acta al concejal tránsfuga que apoyó su investidura. La plataforma Guillena Despierta convocó la manifestación, apoyada por los partidos de la oposición y con una importante respuesta vecinal

03 jul 2015 / 22:12 h - Actualizado: 03 jul 2015 / 22:26 h.
"Elecciones Municipales 2015"
  • Imagen de la mnifestación de este viernes en Guillena. / F.J.D.
    Imagen de la mnifestación de este viernes en Guillena. / F.J.D.
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    Imagen de la mnifestación de este viernes en Guillena. / F.J.D.
  • Imagen de la mnifestación de este viernes en Guillena. / F.J.D.
    Imagen de la mnifestación de este viernes en Guillena. / F.J.D.

Varios cientos de personas se dieron cita en la tarde de este viernes para participar en la manifestación convocada por la plataforma ciudadana Guillena Despierta, para exigir un cambio de dirección en el gobierno municipal. Una marcha que recorrió una de las principales arterias de la localidad, sustentada por un movimiento vecinal fruto de la «indignación», movilizado a partir del pleno de investidura de la corporación municipal y compuesto por gente «con su propia ideología, pero desvinculada y ajena a cualquier partido», según explicó Jesús Martínez, uno de los portavoces del colectivo.

La cabecera de la manifestación la abría una pancarta pidiendo «Dignidad y democracia. Higiene Política». Las reclamaciones de esta movilización son la dimisión del alcalde, Lorenzo Medina, y la devolución del acta de concejal por parte de Javier Pisonero, el concejal tránsfuga que, rompiendo lo acordado en la asamblea de Guillena Si Se Puede (formación con la que concurrió a las elecciones municipales como número 2) votó a favor del PSOE para darle la mayoría absoluta necesaria para investir alcalde. Según la organización, círculos de Podemos, miembros de IU y PP así como alcaldes de otras localidades asistieron para respaldar las reclamaciones de este movimiento ciudadano.

Esta acción de protesta recorrió poco más de un kilómetro hasta llegar a la Plaza de España. En todo momento fue un acto pacífico en el que no fue necesaria ninguna actuación por parte del preceptivo cordón de seguridad que acompañó a la marcha. En torno a las 22:30 horas finalizó ante el edificio del ayuntamiento, donde se dio lectura a un manifiesto, suscrito por la plataforma y apoyado por todas las personas que participaron en la reivindicación. En la lectura pública se señaló que van a «darlo todo hasta que tengamos el acta y el cambio sea realidad». Declararon también la intención de que Guillena Despierta «perdure más allá de esta desvergüenza», convirtiéndola en «un espacio para expresarnos y reclamar nuestros derechos y dignidad», para lo que convocarán una asamblea general y abrirán la adhesión voluntaria.

Este movimiento es «extensible a todo el pueblo, independientemente de la ideología», como aseguraron muchas personas, de toda edad y condición, que participaron en la marcha. Fuentes de la organización y de los partidos de la oposición incidieron en que incluso militantes y componentes de anteriores listas del PSOE han participado en las concentraciones e intervienen en las acciones porque «no apoyan ni entienden esta situación».

Los partidos de la oposición respaldaron esta iniciativa vecinal, animando a que la gente «se exprese con absoluta libertad y sin miedo». Desde las redes sociales han secundado y difundido la convocatoria de esta manifestación, «importante» para «tomar conciencia y reconducir la situación» que el pueblo atraviesa.


UNA PLATAFORMA SUSTENTADA EN LAS REDES SOCIALES

Un grupo de Facebook «abierto, al margen de cualquier color e ideales políticos» de más de 1.000 personas recoge la «indignación por la corrupción y el transfuguismo», motivado por el «atentado a la democracia», según explican desde el colectivo. El grupo ha alentado y vertebrado este movimiento, en el que la gente asegura que ha perdido «el miedo» y que van a llevar a cabo todas las acciones necesarias «de forma pacífica» para conseguir que llegue a Guillena «el cambio que se votó».