Nuestra Señora de Belén de Tomares estrena altar mayor

La iniciativa parroquial ha logrado la unión de todos los feligreses

Manu Ojeda manuojedas /
29 jun 2015 / 21:14 h - Actualizado: 30 jun 2015 / 10:31 h.
"Patrimonio","Religión"
  • El altar, antes y después de su ampliación. / El Correo
    El altar, antes y después de su ampliación. / El Correo
  • Sobre estas líneas, el altar mayor de Nuestra Señora de Belén luce su nueva imagen. A la izquierda, el altar antes de acometerse la ampliación. / El Correo
    Sobre estas líneas, el altar mayor de Nuestra Señora de Belén luce su nueva imagen. A la izquierda, el altar antes de acometerse la ampliación. / El Correo

La sencillez es una de las magníficas piedras para edificar la casa de la vida. Una vida que se forja en el seno de una convivencia íntima y familiar. En este caso, este sentimiento de armonía y humildad al que se alude se encuentra reflejado a la perfección en la parroquia de Nuestra Señora de Belén de Tomares. Es en este acogedor templo donde la iniciativa de un entregado y modesto párroco logró reunir a su feligresía, a la hermandad sacramental de la Vera Cruz –que allí reside– y al Ayuntamiento tomareño para una causa común: la reciente ampliación del altar mayor de dicha parroquia.

Entra en escena la figura de Ramón Díez de la Cortina, párroco de la localidad e impulsor de una iniciativa que comenzó a principios del mes de octubre. Ésta llegó a su culminación de la mano de Enrique Hernández, restaurador que llevó a cabo la pertinente ampliación el pasado 8 de mayo, día en el que se celebró el solemne acto de inauguración de la misma. Según afirmó el propio Enrique, el altar sigue conservando «el arco principal y las dos ménsulas que soportan el grupo escultórico compuesto por las imágenes de María Santísima de los Dolores y San Juan». La ampliación reside en la «conversión» del antiguo marco en el retablo principal.

La aportación de la feligresía parroquial, gracias a la motivación de Díez de la Cortina, ha sido la principal fuente de financiación de la obra cometida, al margen de la colaboración de la hermandad sacramental, especialmente interesada en ella, y del Consistorio tomareño.

Por su parte, el hermano mayor de la hermandad de la Vera Cruz, Francisco Javier Rueda Maguillo, aseguró que la corporación «siempre apoya las iniciativas del párroco». «Este próximo fin de semana daremos el pistoletazo de salida al ambigú de las pavías caseras hasta finales de agosto. La primera recaudación irá destinada a sufragar los gastos generados por tal restauración», añadió