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Agricultor en la vendimia de uva moscatel en Rivesaltes (Francia) en una campaña pasada. / G. Horcajuelo (Efe)
Agosto es sinónimo de vacaciones para muchos, pero también de vendimia francesa para otros. El éxodo se prepara para una nueva campaña en la que habrá menos cosecha y en la que los salarios suben lo mínimo. Eso sí, en España se paga peor.
Unos 15.000 temporeros viajarán un año más a partir de mediados de agosto a la vendimia en Francia: un 90 por ciento repiten la experiencia y el 75 por ciento, como todos los años, procede de Andalucía, en una campaña en la que la uva ha madurado antes y habrá menos cosecha. En cuanto al salario, podría duplicar y casi triplicar el que percibirían en España, según los sindicatos.
Eso sí, ojo con los fraudes: el acceso a las ofertas laborales es gratuito, el contrato es una obligación del empleador y el pagar por acceder a una oferta de empleo no asegura un trabajo.
La secretaria de Migración de FICA-UGT, Lucía García, afirmó a Efe que el salario mínimo sube de los 9,67 euros por hora de 2016 a los 9,76 de 2017, aunque en la práctica las remuneraciones son muy superiores, por los distintos convenios colectivos de cada zona, los complementos en función de la situación familiar y los puestos y actividades que se desempeñen durante la vendimia. Por eso, precisó que aún no se han actualizado todos los salarios de los diferentes departamentos franceses.
¿Y cómo se contrata? Básicamente, se basa en el boca a boca, en el contacto mantenido año tras año del empresario con el jefe de colla o cuadrilla. Esto tiene como efecto una estabilización del número y de las personas concretas que año tras año dejan sus municipios españoles para acudir a la vendimia francesa. Y cuando se producen vacantes o bajas son cubiertas por personas del entorno de la cuadrilla. Familiares y amigos.
Como todos los años, los sindicatos recomiendan no desplazarse «a la aventura» a Francia; es decir, que lo hagan siempre con contrato reglado, utilicen transportes seguros y tengan previsto si «el patrón» les ofrece alojamiento o tienen que buscarlo. También insiste UGT en que los contratos se traten directamente con el empleador y no a través de empresas de trabajo temporal para evitar una reducción de sueldo o prestaciones.
El responsable del sector agrario de CCOO de Industria, Javier Velasco añadió que los andaluces siguen siendo el colectivo más numeroso: las provincias de Jaén y Granada aportarán entre ambas 7.000 personas; más de 1.000 partirán de Sevilla y otros tantos de Cádiz; y el resto saldrá de Málaga, Córdoba y Almería.
A ellos, se unirán 2.000 temporeros de la Comunidad Valenciana; 1.100 de Castilla-La Mancha (de Albacete y Ciudad Real, sobre todo) y 650 de la Región de Murcia, según Velasco.
CCOO de Industria calcula que, entre 15 y 20 días de campaña, los jornaleros percibirán entre 1.400 y 1.600 euros, en función de su categoría, convenio colectivo y horas extra (muchos trabajan «a destajo» para conseguir el mayor salario posible en la temporada). Unos sueldos prácticamente iguales a los de la pasada campaña.
Estas remuneraciones están lejos de los 600 euros que estos mismos trabajadores obtendrían en puestos similares en España, «siempre y cuando les den de alta», subrayó Velasco, en referencia a la elevada economía sumergida que detectan en el campo español.
El 90 por ciento de las personas que repiten en la vendimia son hombres de 30 a 45 años, con estudios primarios y experiencia previa en recogida de uva; el cinco por ciento son mujeres que trabajan en «logística» de la cuadrilla –compras, limpieza, higiene y comida– y no en el campo.
El sindicato detalla que, entre quienes demandan por primera vez un empleo en la recolección de uva, el 85 por ciento tiene entre 30 y 60 años y estudios primarios; un 15 por ciento son universitarios menores de 30 años, con conocimientos de idiomas y sin experiencia agraria.
Según las estimaciones del Ministerio de Agricultura de Francia, a 17 de julio, la vendimia de este año oscilará entre 37 y 38 millones de hectolitros en el país vecino, un 17 por ciento menos interanual.
Vísperas de una buena campaña
La vendimia en Andalucía se adelantará esta campaña y presentará una uva de buena calidad y algo menos de producción en todas las zonas, salvo en Jerez. Así lo pronostica Miguel Pérez, responsable de vino de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) en Andalucía y secretario general en Cádiz, quien explica que el adelanto de la recolección se debe a las dos olas de calor de junio, que hizo que la uva madurara antes, sobre todo en Córdoba y en Málaga. En Jerez, en cambio, el adelanto puede ser mínimo, de unos diez días o menos, ya que aún está por ver cuándo se obtiene el punto óptimo de la maduración. En Huelva, la zona más tardía, la producción se estima que caerá entre un 20 y un 25 por ciento respecto a 2016, volviendo a la media habitual. En esta zona destaca la ausencia de enfermedades y a final de agosto, a vendimiar.
En Málaga, el aumento de la producción se estima entre el cinco y el diez por ciento en la zona de Ronda, donde hay buenas perspectivas porque sí llovió. En Mollina, en cambio, acumulan tres años con estrés hídrico y se prevé una campaña «difícil» con menos producción. En Córdoba la falta de lluvia y el calor también bajó la producción un 20 por ciento, según Pérez, quien destacó que la uva está «muy sana».
En Jerez, la producción crecerá un 25 por ciento y tampoco sufrió enfermedades. «Hay buenas perspectivas en cantidad y calidad». De hecho, esta mayor producción compensará el bajón en otras zonas. En Trebujena y Jerez se estima que la recogida arranque la segunda semana de agosto.